Movimiento en corto para las acciones de Amper que ya suman cerca de un -6% de pérdida en valor después de la entrega de sus resultados financieros de los 9 primeros meses del año. Aunque los ingresos de la compañía se incrementaron un 21%, alcanzando los 254,8 millones de euros y el resultado bruto de explotación (Ebitda) se ubicó en 14,8 millones de euros registrando un incremento del 15% frente al mismo periodo del año anterior, el beneficio neto entregado por Amper fue 976.000 euros, lo que significa una pérdida del 37% frente a los 1,5 millones alcanzados en los 9 primeros meses de 2021.
La compañía aduce el cómputo en la evolución de su negocio reflejado en sus datos financieros, especialmente por el incremento de los precios de energía, transporte, logística, materias primas y otros componentes que hacen parte de la debacle económica por la que atraviesa el mundo actualmente.
UNA CARTERA DE PROYECTOS DE CASI 400 MILLONES
No obstante, Amper sigue trabajando arduamente con lo cual, la unidad de negocio de tecnología que representa para la compañía un 56% de la cartera total, ha apoyado un resultado en cartera de proyectos superior a los 394 millones de euros hasta septiembre, lo que corresponde a un incremento del 24%.
Una de las estrategias que las compañías han venido utilizando para mejorar sus indicadores en medio del sobrecosto de producción u operativo, es trasladando el exceso al cliente final. Veremos si Amper utiliza la misma estrategia para salvar el precio de su acción de un desplome sin tener que afectar drásticamente su mercado. La verdad es que técnicamente, hace dos semanas la acción realizó una ruptura de la resistencia más cercana establecida en 0,1634 euros dando unos primeros visos de retorno al camino alcista en el corto plazo.
AMPER EN BOLSA
Sin embargo, así como lo venimos mencionando desde abril de este año, las acciones de Amper vienen trabajando un canal descendente que de momento debería buscar el nivel inferior de dicho canal, lo cual correspondería a un desplome adicional del 50% hasta niveles que no visita desde 2016 en inmediaciones de 0,075 euros. Adicional a esto, el índice de fuerza relativa se encuentra en niveles cercanos a la sobre compra, lo que podría ejercer un movimiento de punto de giro a la baja y presionar las caídas.
La única manera de buscar oportunidad alcista en las acciones de la compañía española sería ubicándose sobre los 0,25 euros con el fin de lograr un objetivo en el cierre del ciclo macro que acompaña la estructura hasta los 0,35 euros.