IAG ha presentado sus resultados del ejercicio 2021, cerrado con unas pérdidas de 2.933 millones de euros. Los ingresos alcanzaron los 8.455 millones de euros, un 8,3% más que hace un año cuando la cifra que obtuvo IAG alcanzó los 7.806 millones de euros. La capacidad de transporte de pasajeros en el cuarto trimestre un 58% de la capacidad de 2019, frente al 43% del tercer trimestre y un 36% para el todo el año del total de 2019.
La relajación de las restricciones de viaje impuestas por los gobiernos a medida que avanzaba el año resultó en una mejora de la demanda de viajes. El impacto de Omicron, que se hizo aparente el 25 de noviembre, tuvo un impacto negativo a corto plazo en el resultado de las operaciones, las reservas de pasajeros y las cancelaciones.
Los flujos de efectivo de las operaciones se situaron en 1.000 millones de euros en el segundo semestre de 2021, una mejora significativa propiciada por un EBITDA positivo en el cuarto trimestre, por un número sólido de reservas y por un capital circulante favorable.
Los planes de capacidad de transporte de pasajeros actuales para el primer trimestre de 2022 son de alrededor del 65% de la capacidad de 2019 y para el ejercicio son de alrededor del 85% de la capacidad de 2019. Omicron ha afectado a las reservas en enero y febrero de 2022, pero ha tenido un impacto mínimo en las reservas para Semana Santa y verano de 2022.
Se espera que la inversión en inmovilizado en 2022 sea de 3.900 millones de euros, reflejando la necesidad de recuperar los niveles de capacidad previos a la pandemia, el retraso en las entregas de aeronaves que se esperaban en 2021 y el diferimiento en ciertos pagos previos a la entrega de aeronaves correspondientes a años anteriores. Se espera que se entreguen 25 nuevos aviones en 2022.
IAG en gráfico
A nivel técnico, desde el mínimo maraco por la pandemia, IAG continua lateral, moviéndose entre los 2,5 y 1,0 euros. Hasta que el total de los países no elimine el 100% de las restricciones, IAG no podrá despegar, para recuperar su nivel prepandemia. La proyección en el corto plazo es bajista, siguiendo la tendencia bajista que trae desde 2021.