Con una inversión aproximada a los 220 millones de euros, Siemens Gamesa pretende ampliar las instalaciones de su fábrica de producción de aerogeneradores ubicada en Yorkshire, Inglaterra, y con la cual creará más de 200 puestos de trabajo para finales de 2023. Gracias al apoyo del gobierno de Reino Unido, la firma incrementa sus inversiones en el país británico para cubrir la potencial demanda de energía a través de fuentes renovables y en especial de la eólica marina.
Pareciera que esta información repercutió en el incremento del precio de la acción para el mes de agosto el cual avanzó cerca de un 17%. Sin embargo, el alto costo de las materias primas que se utilizan para la fabricación de palas y turbinas parece afectar el movimiento de impacto al alza que la acción de Siemens Gamesa necesita para salir adelante.
Si miramos técnicamente la acción de Siemens Gamesa en gráfico de marco diario, establecemos una clara línea de tendencia bajista desde el 8 de enero la cual ha venido realizando mínimos y máximos decrecientes apoyándose de la media móvil de corto plazo. Una vez el precio visita los 22,17 euros que corresponde al mínimo de julio y apoyado de las noticias provenientes del Reino Unido, el precio se impulsa desde el nivel 61,8 de retroceso de Fibonacci en busca de la directriz bajista en la cual se encuentra en este momento.
Podemos observar que adicional a que el precio está respetando la directriz bajista, también se ubica en estructura bajista de acuerdo con la resistencia más importante del 08 de marzo de 2021 ubicada en 26,32 euros. También encontramos que el precio trabaja por debajo de la media móvil exponencial de largo plazo, es decir, de 250 periodos la cual en conjunto a las demás condiciones podrían lastrar el precio de la acción nuevamente a niveles de 21 euros.
Los problemas que provienen del Sahara Occidental y la interceptación de turbinas eólicas, han hecho que fondos de inversiones retiren su apoyo a la empresa reteniendo el crecimiento del precio de su acción apoyando la idea de las posibles caídas. Sin embargo, sabemos que los resultados financieros y fundamentales de la compañía son relativamente sólidos para afrontar este tipo de crisis de manera tal que un rompimiento de la directriz bajista que confluye con la ruptura de la resistencia hará que, ante cualquier retroceso y trabajo sobre la misma área, es decir, sobre los 26,5 euros, impacte a favor en busca de los máximos de enero ubicados en niveles de 39,35 euros.