El presidente de LVMH, Bernard Arnault, se posiciona como el empresario que más ha aumentado su fortuna en este ejercicio. El francés se adelanta a los grandes magnates tecnológicos, aunque en las últimas semanas Jeff Bezos, Richard Branson o Elon Musk hayan acaparado los medios informativos con su carrera espacial. Arnault ha visto aumentar su fortuna según recoge Bloomberg debido al buen momento que atraviesa LVMH.
La firma de lujo se sitúa como la más valiosa de Europa robándole el puesto a Nestlé, Roche o Novartis que han ocupado esta posición en las últimas décadas además de continuar en el podio de los más ricos del viejo continente.
El sector del lujo gana al tecnológico
El tercer hombre más rico del mundo cuenta con un patrimonio estimado en más de 170.000 millones de dólares, cifra que hay alcanzado tras aumentar su fortuna en 55.000 millones en el último ejercicio. Ha conseguido superar a Bill Gates y si consigue que LVMH continue con su actual progresión antes de que acabe 2021 conseguiría alcanzar a Musk del que solo le separan 7.000 millones de dólares.
Así se sitúa como el único magnate que no pertenece al sector tecnológico y consigue aumentar su fortuna. Detrás del galo se encuentran muchas caras conocidas en Silicom Valley como los creadores de Google, Larry Page o Sergei Brin que han conseguid0o aumentar su patrimonio en 35.000 millones de dólares en gran parte por el aumento de capitalizaciones de Alphabet al publicarse sus resultados, detrás de ellos se sitúan Mark Zuckerberg (Facebook) y Steve Ballmer (Microsoft) que cierran la lista.
En el pasado mes de mayo consiguió alcanzarse como el hombre más rico del mundo por unas cuantas horas superando en 300 millones de dólares a Jeff Bezos.
“Creo que no soy exitoso, pero lo intento”
Arnault comenzó su trabajo en la empresa familiar en los setentas, y en 1974 ya se alzó como CEO del grupo al que redirigió hacia el sector inmobiliario, con la consolidación de Férinel. La empresa francesa siguió su expansión con la adquisición de Financière Agache y después de la textilera Boussac, que era dueña de la emblemática Christian Dior. Arnault invirtió gran parte de su capital en la compra de la mayoría de las acciones del grupo al que ha conseguido multiplicar su valor en unas 15 veces debido en parte Loewe, Berluti, Kenzo, Guerlain, Fendi, Donna Karan, Sephora, Marc Jacobs, o los grandes almacenes Le Bon Marché y La Samaritaine que inagurarrón este año.
Ha conseguido ser el propietario de las grandes marcas de perfumes, joyas o moda europeas, “Creo que no soy exitoso, pero lo intento”, afirmo en una entrevista algo que puede que sea clave de su gran éxito. Desde 2005 se alza como el hombre más rico de Francia, según la lista de la revista Forbes.
Hace sólo un par de años su fortuna se situaba en los 30.000 millones de dólares, el empresario es el dueño del 47% del conglomerado y de sus marcas, estas desde el pasado 2019 no paran de aumentar su valor en bolsa en el 2019 crecieron cerca de un 57%.
Buen momento para el sector
Los inversores apuestan cada vez más por el mundo del lujo, El S&P Global Luxury Index se ha revalorizado el 156% desde el 18 de marzo de 2020 y cotiza próxima al récord. LVMH se encuentra dentro del índice con un alza entorno al 130% después de los bajos causados por la pandemia. Singular Bank afirma que “las nuevas tendencias, como la revolución digital y los nuevos consumidores de lujo, también llamada la democratización del lujo, van a contribuir a mantener su crecimiento en los próximos años”.
Su fortuna no se debe solo a LVMH si no que el empresario francés ha apostado también por otras marcas, es propietario del 2% de Hermès y del 8% de la cadena de supermercados francesa Carrefour, además posee una amplia colección de arte que expone en la Fundación Louis Vuitton de París