En ocasiones las lentes de contacto comunes pueden resultar un método de corrección visual molesto para algunas personas, especialmente, aquellas que llevan un estilo de vida muy activo, niños, adolescentes o deportistas que no quieren renunciar a su actividad, pero también quieren disfrutar de una buena visión. Para ellos, existe una solución muy práctica y cómoda que aporta libertad a la hora de afrontar el día a día: las lentillas para dormir o lentes Orto K.
¿Qué es la Orto K?
Es una innovadora técnica que resulta muy eficaz para corregir la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo mientras se duerme. Las lentillas nocturnas tienen una curvatura interior que se adapta a la morfología ocular de cada paciente. Al colocarse correctamente en la noche antes de dormir, la capa externa del ojo llamada epitelio corneal, se adapta suavemente a la lente y va corrigiendo la deficiencia ocular de cada paciente de manera paulatina y sin causar incomodidad o una sensación diferente a la de una lentilla común. De hecho, los usuarios de las lentes Orto K, afirman que notan la presencia de la lente las dos o tres primeras noches de uso, pero que luego este efecto va desapareciendo.
Tras retirar las lentes por la mañana, el paciente obtiene una visión totalmente normal. Además, al estar diseñadas para utilizarse durante las horas de sueño, el material con el que están fabricadas es semirrígido y permeable al gas, diferente al material blando de las lentillas tradicionales. Este tipo de material permite que siempre haya lágrima entre la córnea y la lente de contacto, evitando así que se quede pegada al ojo o que este se deshidrate. Siempre y cuando se sigan los hábitos de higiene recomendados, al igual que con cualquier lentilla, no existe mayor problema.
A diferencia de otros métodos correctivos como la cirugía láser, Orto K es idóneo para adultos de cualquier edad, adolescentes y para niños desde los 6 años, siempre con la supervisión de sus padres para un correcto uso de las lentes.
Salud visual y niños
Tal y como se puede extraer del “VI Estudio de Prevalencia de la Miopía en Niños” 1 de cada 5 niños ya padece miopía en España. Esto supone un 17% más que hace cinco años. Con la pandemia, sin poder pasar tiempo al aire libre y el abuso de horas frente al televisor y otras pantallas, este porcentaje rozó el 20%. Si bien es cierto que en el último año se ha ralentizado un poco debido al aumento de concienciación social sobre la importancia de pasar tiempo al aire libre y la aparición de nuevas técnicas de control, sigue siendo un problema de salud que puede tener consecuencias más graves.
Los métodos tradicionales, además de no ser a veces los más adecuados para los niños, ya que pueden limitar su actividad diaria, no frenan el avance de la miopía. Según el Consejo General de Ópticos y Optometristas, las lentes Orto K son el medio no invasivo más indicado para desacelerar la progresión de la miopía y otros defectos visuales en niños y niñas en edad escolar. Por esta razón, son cada vez más los padres que eligen la ortoqueratología para el control de la miopía de sus hijos.
Lentillas para dormir, una opción que prefieren los deportistas
Boxeo, natación, esgrima, fútbol… Las lentillas Orto K son uno de los métodos de corrección visual que más deportistas eligen. Son una de las mejores alternativas para todas estas personas que necesitan libertad total para practicar cualquier disciplina deportiva, que buscan ver correctamente sin gafas ni cirugía y que aportan las lentes Orto K. A diferencia de la cirugía refractiva, la ortoqueratología es un tratamiento reversible y no invasivo que, además de aportar comodidad durante el día, actúa como un eficaz método de control para la miopía.
Especialistas en adaptación de Orto K en Madrid
Avanlens es el centro especializado en Madrid para la colocación de Orto K. Su equipo de profesionales, con años de experiencia en el sector, se ocupa de evaluar la condición del paciente a través de pruebas oftalmológicas complementarias para luego determinar qué lente es la más apropiada. Adicionalmente, ofrece orientación sobre la correcta colocación de las lentes para que el resultado sea el esperado.
Para comprobar la efectividad de la técnica, los profesionales del centro de contactología avanzada realizan una revisión personalizada tras la primera noche de uso, otra durante la primera semana y, por último, una al mes desde su uso. En caso de no obtener los resultados esperados, su equipo de optometristas se encarga de reajustar la lente a las necesidades del usuario.
Tener una visión óptima facilita la realización de múltiples actividades. Contar con una técnica no invasiva y con resultados progresivos como Orto K, es una gran opción para las personas que buscan alternativas a las gafas correctivas convencionales, porque ver bien sin gafas ni cirugía sí es posible.