Termina el proceso de liberalización de los trenes españoles. Desde este viernes los usuarios podrán usar también los trenes de Iryo, que se suma a Ouigo y a la estatal Renfe en su búsqueda por pasajeros. Lo llamativo del servicio es que sus precios y su estructura son los más parecidos a Renfe.
La empresa, fundada en España pero controlada desde Italia, empezará a trabajar en la ruta entre Madrid y Barcelona, pero además en los próximos meses sumará dos de las rutas clave del sistema ferroviario en el país, las que conectan la capital con Valencia y Andalucía, incluyendo ciudades como Málaga y Sevilla. Por sus características y su precio es la que tiene todo para ser el principal rival del AVE, el buque insignia de la empresa estatal.
Tampoco es una tarea fácil. Sus precios son superiores a las dos opciones low cost, Ouigo y el AVLO de la propia Renfe, pero sus opciones de lujo y la flexibilidad para cambiar entre ellas le dan un factor diferencial que puede ser un dolor de cabeza para los nuevos.
EL RETORNO DE IRYO MARCA EL REGRESO DE LA COMPETENCIA
Lo cierto es que la competencia por la venta de pasajes ya ha iniciado. Desde hace unas semanas las tres han hecho disponibles sus pasajes durante todo el 2023, lo que además ha dejado saber la fecha en que la empresa Italiana empezará a moverse a sus otros dos destinos esenciales. El 16 de diciembre a Valencia, y el 31 de marzo próximo a Andalucía.
Son rutas, al igual que la de Barcelona antes de las nuevas llegadas, donde la empresa estatal podía gozar de un monopolio importante. Si bien esto los llevabas a ignorar algunas críticas, al menos según las evaluaciones de usuarios en la red, Renfe ha reaccionado no solo con la creación de AVLO sino con el rescate de una buena parte de las rutas que no atravesaban Madrid. Son opciones que le permiten respirar lejos de la competencia y que les abren nuevas opciones de viajes a los usuarios.
Será interesante ver como funciona la dinámica. Lo cierto es que Iryo tiene una visión más bien pensada para viajes de negocios y de cara a ofrecer distintas opciones a los pasajeros, Ouigo se presenta como una opción siempre menos costosa y Renfe ha buscado un punto intermedio manteniendo el AVE y sumando el AVLO, además de mantener la exclusividad de los viajes de cercanías y media distancia.
RAQUEL SÁNCHEZ: «LA ALTA VELOCIDAD PIERDE SU CARÁCTER ELITISTA Y SE DEMOCRATIZA»
Una que ha celebrado la llegada de Iryo a las vías es la ministra de Transporte, Raquel Sanchéz, que participo en el viaje inaugural del lunes con destino a Valencia. Durante el día aprovecho para presumir de la labor del Gobierno durante todo el proceso de liberalización. Así lo hizo saber varias veces durante su discurso posterior al viaje.
Según explicó Sánchez, con la liberalización, la alta velocidad ha perdido su carácter elitista», ya que ahora «hay mejor competencia» y se «ha alcanzado la democratización que buscábamos». Es una muestra más del interés del Gobierno en fortalecer la industria ferroviaria que defienden como el transporte más sostenible.
UNA CÁLIDA BIENVENIDA A LA COMPETENCIA
Lo cierto es que Renfe no ha tardado en responder a la llegada de sus competidores. Ya había tirado de su legado histórico para recibir a los franceses de Ouigo con una campaña donde celebraban el inicio del ‘Juego de Trenes’. Era una publicidad donde mostraban su disposición a enfrentarse de frente con los competidores, e incluso a aprender de ellos.
Pero esta vez el mensaje parece tener algo más de ironía. La ferroviaria estatal ha recibido a Iryo, una empresa recordemos fundada en España aunque ahora sea manejada desde Italia, con un mensaje en italiano. «Benvenuti y buena suerte, que siga el juego de trenes» dice uno de sus maquinistas en el anuncio entre risas, antes de recordar que su padre y su abuelo trabajaron también para la estatal.
Los franceses tampoco se han asustado del nuevo reto, anunciando «Jornada de Reflexión» de 48 horas en la que, como día partido político antes de una elección, no emitirá ninguna comunicación. Pero además este anuncio sirvió también para informar que de ahora en adelante los usuarios podrán reservar sus pasajes por hasta 48 horas antes de pagarlos, durante las cuales tampoco recibirán recordatorios o anuncios al correo registrado.
Es una buena noticia para los usuarios, que las tres se muestren dispuestas a competir abiertamente. Esto hasta ahora ha obligado a más promociones, mejores precios y más cuidado con el servicio. De cualquier modo todas están buscando ganar y, aunque intenten ser amistosos frente a la cámara y puedan llegar a algunos acuerdos clave, las tres quieren quedarse con el trono ferroviario. Como dice la propia Renfe, «Que empiece el juego de trenes».