En pocos cuadros clínicos el tiempo es más crucial que en la atención médica de un infarto, en cuyo tratamiento la angioplastia primaria ha demostrado ser la mejor y más eficaz estrategia. Esto ocurre en los casos de infarto con elevación del segmento ST, en los que la formación de un trombo obstruye la circulación coronaria del músculo cardiaco y genera una necrosis en las células del miocardio como consecuencia de una isquemia prolongada.
Los síntomas de este accidente cardiovascular potencialmente mortal incluyen presión en el pecho que irradia a las extremidades, la espalda o el cuello, mareos o desmayos, náuseas, sudor, palidez, dificultad para respirar o alteraciones en los latidos del corazón, entre otros, y requieren de una atención médica especializada lo más inmediata posible. De ello dependerá, en un porcentaje de casos mayoritario, la supervivencia de quien lo sufre y la superación del cuadro clínico sin secuelas para la salud.
Por eso resulta crucial acudir a un servicio de Urgencias que contemple en su cartera de servicios la angioplastia primaria, como es el caso del Hospital General de Villalba, perteneciente a la red sanitaria pública de la Comunidad de Madrid, en el que se atienden este tipo de enfermos desde su puesta en marcha, hace ya cerca de cinco años.
“La angioplastia primaria consiste en la dilatación de una arteria coronaria en la fase aguda de un infarto con el fin de limpiar el trombo que la obstruye y facilitar la circulación sanguínea lo antes posible, lo cual reduce el daño sobre el músculo cardiaco y mejora la supervivencia y calidad de vida del paciente, y en nuestro hospital contamos con personal médico especializado, y permanentemente disponible, para su realización a través de un cateterismo”, explica el Dr. Felipe Navarro, jefe del Servicio de Cardiología del hospital.
CARTERA DE SERVICIOS AMPLIA Y COMPLETA
Esta es sólo una -aunque de las más importantes, dada la prevalencia, gravedad y necesidad de atención urgente que requiere un infarto- de las técnicas disponibles en el citado servicio que hacen que pueda ofrecer una “muy amplia y completa” atención en esta especialidad, en palabras del Dr. Navarro. Gracias a ello, añade, “la necesidad de derivación de pacientes a otros hospitales ha ido reduciéndose progresivamente y actualmente el Servicio de Cardiología cuenta con medios propios muy completos para atender las patologías cardiovasculares”.
El Servicio de Cardiología del Hospital General de Villalba cuenta con personal médico especializado, y permanentemente disponible
Concretamente, este departamento realiza un amplio abanico de pruebas diagnósticas, como electrocardiogramas, ecocardiogramas transtorácicos y transesofágicos, pruebas de esfuerzo, Holter, monitorización ambulatoria de presión arterial (MAPA), cateterismos cardiacos o estudios electrofisiológicos.
En cuanto a las técnicas terapéuticas, la cardioversión eléctrica, el implante de marcapasos y desfibriladores, la ablación con catéter de arritmias cardiacas y la angioplastia coronaria programada, junto a la citada angioplastia primaria para el tratamiento del infarto agudo, disponible las 24 horas del día, completan la cartera de servicios de Cardiología del Hospital General de Villalba.
Dichas técnicas se realizan, además, en unas modernas y totalmente equipadas instalaciones que, en su área de Cardiología Clínica, incluyen tres consultas dotadas con electrocardiografía y ecocardiografía cardiaca; mientras que en Cardiología no Invasiva cuenta con instalaciones equipadas para la realización de electrocardiogramas, ecocardiogramas, pruebas de esfuerzo. Holter, MAPA, revisiones de marcapasos y desfibriladores. Asimismo, su Sala de radiología está preparada para la realización de cateterismos cardiacos, tanto programados como urgentes, e implante de marcapasos y desfibriladores.
La dotación humana, tecnológica y de infraestructura de su Servicio de Cardiología permite al hospital ofrecer la mejor asistencia sanitaria en el diagnóstico y tratamiento de todo tipo de enfermedades cardiovasculares
Y todo ello, de la mano de un equipo del máximo nivel profesional y humano y con amplia experiencia que, liderado por el Dr. Navarro, está formado por cuatro cardiólogos clínicos, cuatro cardiólogos hemodinamistas, tres cardiólogos arritmólogos, tres enfermeras y un técnico de Radiología.
Una dotación humana, tecnológica y de infraestructura que, como explica el jefe de su Servicio de Cardiología, permite a este hospital ofrecer “la mejor asistencia sanitaria en el diagnóstico y tratamiento de todo tipo de enfermedades cardiovasculares”, desde la insuficiencia cardiaca hasta las microcardiopatías y enfermedades del pericardio, pasando por la cardiopatía isquémica (angina de pecho, infarto agudo de miocardio…), las arritmias cardiacas (taquicardias, bloqueos cardiacos, etc) y las valvulopatías.
Y es que no hay que olvidar que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en el mundo occidental, y que la prevención y control de sus factores de riesgo, como el tabaquismo, la hipercolesterolemia y la hipertensión, cada vez más frecuentes entre la población, es importante para evitar su aparición.