Nestlé deja en el aire el futuro de 42 empleados de la N81, la planta que dejará de fabricar el café descafeinado a partir de 2023. La empresa suiza deslocalizará la producción a Vietnam, donde cuenta con una planta de este producto, pero no ha dado a conocer a estos empleados las alternativas que tendrán de cara a la recolocación.
Esperamos que las recolocaciones sean de calidad y negociadas directamente con los sindicatos
«Algunos de ellos llevan más de 20 años y ostentan cargos altos dentro de la planta», han señalado fuentes sindicales consultadas por MERCA2. «La empresa no ha dado a conocer detalles ni de los puestos, ni del rango, ni tampoco del turno a los que se incorporarían», según han sostenido.
«La empresa nos comunicó el cierre efectivo de esta planta a partir de enero del próximo año y traspasaban toda la producción a Vietnam», han destacado las mismas fuentes. La empresa aseguró en un comunicado que invertirá 100 millones de euros en esta fábrica, pero silenció esta deslocalización.
DESLOCALIZACIÓN TRAS UNA MILLONARIA INVERSIÓN
Asimismo, tampoco ha dado detalles sobre cómo se invertirán estos cien millones en esta histórica planta, construida en 1968 y que se ha convertido en una de las mayores fábricas de café de Nestlé. Su producción abastece a todo el mercado español y portugués, así como exporta importantes volúmenes a Europa, América, Asia, África y Oceanía.
«Nestlé ha asegurado que habrá una recolocación para estas 42 personas», pero no ha concretado ni puestos ni si se mantendrán las condiciones laborales adquiridas desde hace años. «La principal incertidumbre es si nos mantendrán las mismas condiciones», han sostenido los representantes de los empleados consultados por este medio. Las mismas fuentes han mostrado, además, su rechazo a esta deslocalización y consideran que la mejor opción es continuar la producción del café descafeinado en Girona sin cambiar las condiciones laborales.
«A estos 42 empleados se les rompe la rutina y la organización con la familia», han sostenido las mismas fuentes. A su juicio, la inversión se puede realizar sin tener que cerrar parte de la fábrica. La empresa, por su parte, ha decidido reforzar la producción y llenado de café soluble, así como la fabricación de las cápsulas de café, un proceso que se combinará con la automatización y tecnología para mejorar la logística y sostenibilidad. En los próximos años, según la entidad suiza, se crearán «nuevas oportunidad laborales», toda vez que se incremente la capacidad de la fábrica.
NESTLÉ PILLA POR SORPRESA A LA PLANTILLA
El anuncio realizado por Nestlé cogió por sorpresa a parte de la plantilla, según han sostenido las fuentes. La empresa decidió hacer pública la decisión antes de comunicarlo de forma interna. En los próximos días, la empresa dará a conocer algunos detalles de los planes a los trabajadores, pero hasta ahora la «incertidumbre es total», han considerado.
El nerviosismo en la plantilla es palpable. «¿Si un empleado lleva 25 años como encargado dentro de la planta puede ahora cargar y descargar pedidos?», han reflexionado las fuentes consultadas. «Hay ciertas responsabilidades que no están dispuestos a perder», han indicado. «Esperamos que las recolocaciones sean de calidad y negociadas directamente con los sindicatos», han señalado. En este sentido, sostienen que una negociación individual entre personas y empresas podría derivar en la pérdida de condiciones laborales. «A la hora de negociar hay personas que se hacen muy pequeñas», han matizado.
NESTLÉ MANTIENE LA FÁBRICA DE GIRONA COMO UN REFERENTE
La firma suiza ha triplicado la inversión en esta fábrica respecto a la última realizada en 2017 para mejorar la tecnología, así como otros 20 millones más para renovar una de las calderas. De esta forma, ha mostrado su compromiso para renovar y actualizar la planta, que da trabajo directamente a unas 870 personas, sin contar con los empleos indirectos.
La nueva inversión se dividirá a lo largo del próximo trienio, según acordó la cúpula. La empresa, según expuso Jordi Jaen, director de la fábrica de Nestlé en Girona, ha convertido esta fábrica en un imán para la inversión, donde se reconoce la «cualificación profesional y las competencias del equipo humano». Además, «representa un paso adelante en la consolidación de la fábrica como planta de referencia del Grupo».
NESTLÉ TRIPLICA EL EMPLEO EN GIRONA EN UNA DÉCADA
Con estos cien millones, según el fabricante de alimentación, «permitirán mantener el actual nivel de empleo de la fábrica y crear, al mismo tiempo, nuevas oportunidades laborales en los próximos años». En la última década, la fábrica ha triplicado la plantilla, al pasar de los 250 empleados de 2011 a los casi 900 actuales. La inversión aquel año alcanzó los 20 millones de euros con el fin de duplicar la producción de las cápsulas de café, instalando así hasta cuatro nuevas líneas de producción. La capacidad de la fábrica se incrementó hasta los 1.800 millones de cápsulas anuales.
Para esta línea de negocio, Nestlé invirtió un total de 44 millones en su puesta en marcha de las cápsulas de café, que comenzaron a hacerse populares en plena crisis de 2009. No obstante, según ha incrementado la producción en esta línea de negocio, la empresa suiza ha reducido sus negocios de descafeinado, hasta el cierre de este negocio en Girona. En 2011, empleaba a un total de 400 personas en la producción de café soluble y descafeinado Nescafé.