El servicio de gran valor añadido de interim management tiene la finalidad de proveer a los clientes con recursos y capacidad de gestión, de forma rápida y temporal. Así, en momentos de cambio, transición o crisis, las empresas pueden disponer de ejecutivos que se centran en la gestión eficiente.
Actualmente, SMW (Senior Management Worlwide) es una de las alianzas más antiguas y exitosas de empresas dedicadas a esta tarea. Esta firma cuenta con 25 socios capaces de proporcionar soluciones en más de 40 países. Uno de ellos es QMT, socio exclusivo en España, que de esta manera ha reforzado su posición como entidad de referencia para sus clientes.
Apoyo internacional para los clientes de QMT
En un contexto en el que la economía está cada vez más globalizada, el apoyo de una red internacional de interim management es un soporte vital para poder desarrollar proyectos en distintos continentes. En concreto, a través de QMT, y gracias a su pertenencia a SMW, es posible acceder a este tipo de servicios en Europa, Oriente Medio, América y Asia.
De esta manera, los clientes de esta firma reciben acompañamiento por todo el mundo y cuentan con ayuda para superar retos, desarrollar oportunidades de negocio y mejorar resultados. Estos servicios también permiten cubrir competencias clave o la ausencia de experiencia ante una nueva oportunidad, desarrollar talentos y llevar adelante cualquier tipo de iniciativa crítica para una organización.
En total, QMT pone a disposición de sus clientes una red de interim managers compuesta por más de 175.000 ejecutivos de éxito que han ejecutado más de 11.000 proyectos en más de 40 países. La incorporación de uno de estos agentes a una empresa supone un ahorro de tiempo y dinero.
Ejemplo del éxito global de interim management
Recientemente, una empresa manufacturera global registró una serie de problemas en una de sus fábricas ubicadas en Estados Unidos. En este caso, el equipo de liderazgo corporativo no podía superar problemas como ventas decrecientes, déficit en la calidad del producto e incumplimientos en los compromisos de entregas.
En este contexto, un interim manager pudo identificar rápidamente los problemas, que por su experiencia ya había visto varias veces. Entonces, comenzó a tomar varias decisiones en simultáneo. Por ejemplo, se centró en cuellos de botella específicos que estaban afectando la calidad y los tiempos de entrega. También revisó los patrones de compra de la fábrica y ayudó al equipo de la empresa a identificar otros errores en el sistema de trabajo.
Tres meses más tarde, los inventarios disponibles de la empresa habían vuelto a disminuir, los plazos de entrega se habían reducido en un 50 % mientras que también se habían mejorado los procesos de fabricación.
Este caso es solo una muestra que indica que con servicios de interim management, como los que es posible conseguir a través de QMT, una empresa que opera en un contexto global puede superar retos y volver a crecer.