La compañía presidida por Manuel Manrique alcanzó un beneficio neto de 150 millones de euros durante 2018, un 15% más respecto al año anterior. Su ebitda fue de 543 millones de euros, un 29% superior al de 2017. Según Sacyr, estos datos se deben a cuatro aspectos principalmente: rentabilidad, disciplina financiera, expansión internacional y diversificación de las áreas de negocio.
Dos tercios de la cifra de negocios de Sacyr tiene como origen los mercados internacionales
Cabe destacar que las cuatro divisiones de Sacyr incrementaron su ebitda: Ingeniería e Infraestructuras (+82%), Concesiones (+17%), Servicios (+14%) e Industrial (+5%). La rentabilidad de los negocios, medida por el margen de Ebitda, creció otro año más y pasó del 13,7% de 2017 al 14,3%.
La cifra de negocios de Sacyr alcanzó los 3.796 millones de euros (+23%). De esa cantidad, dos tercios ya se obtuvieron en los mercados internacionales. “Este crecimiento de doble dígito es consecuencia del éxito en la contratación registrado por todas las áreas de negocio durante los últimos ejercicios”, señalan en la compañía.
SACYR Y SU CARTERA DE INGRESOS
La cartera de ingresos futuros cerró el año en 41.674 millones de euros (+2%). La cartera refleja la fuerte internacionalización de la compañía ya que el 71% está situada ya fuera de España. Si nos centramos en las diferentes áreas geográficas, América ya supone el 38% de la cartera, mientras que Europa se sitúa en el 59%, mientras que el 3% restante está ubicado en otros continentes.
Por actividades, en Infraestructuras los contratos internacionales representan el 88% del total; en Concesiones, el 82%; en Servicios, el 29%; y en Industrial, el 11%.
De los proyectos ganados por la compañía durante 2018, en cualquiera de sus divisiones, cabe destacar la remodelación del ferrocarril central de Uruguay, la construcción del Metro de Fortaleza (Brasil) y los cuatro primeros contratos de la filial constructora en EEUU por un total de 318 millones de euros. La entrada en el país norteamericano era uno de los hitos más relevantes del Plan Estratégico.
La deuda neta proforma del grupo se sitúa en 4.046 millones de euros, de los que más del 70% del endeudamiento está vinculado a proyectos concesionales. Fruto de la solidez de los resultados y de la buena evolución de los negocios de la compañía, se reinició una política regular de dividendos. Así, durante 2018, Sacyr entregó dos scrip dividend, que sumaron una remuneración de 0,103 euros por acción.
Desde que la firma lanzara el Plan Estratégico 2015-2020, el ebitda de la multinacional ha disfrutado de un crecimiento anual acumulado del 23%, mientras que el resultado neto y el flujo de caja operativo han crecido, respectivamente, el 46% y el 76% anual. Sacyr ha avanzado en este periodo en su foco en el negocio concesional y tres cuartas partes del ebitda ya procede de activos de este calado.