La limpieza de nuestro coche es una tarea necesaria para mantener el vehículo en perfecto estado. Es una cuestión tanto de higiene como de estética. Cuidar su aspecto interior y exterior forma parte de los cuidados básicos de nuestro medio de transporte. Para algunas personas basta con un aspirado por el suelo, sacudir las alfombrillas, pasar un trapo por el salpicadero, y darle un manguerazo de agua por fuera. Pero esto no es suficiente si lo que queremos es tener un coche que luzca impecable como recién comprado. Para que consigas un vehículo impoluto, agradable, perfumado y brillante, no dejes de seguir los siguientes consejos.
1LAVAR EL COCHE CON MÁS FRECUENCIA
Aunque a veces de un poco de pereza, es importante limpiar el coche semanalmente, sobre todo la carrocería. La suciedad, la polución y los excrementos de aves, deterioran la pintura muy rápidamente, así que si queremos que el coche luzca bonito y brillante, es conveniente hacer una limpieza sencilla cada semana. Basta con tomar un cubo de agua y diluir un poco de jabón, por ejemplo champú para el pelo, o un jabón específico para carrocería. Se aplica con una esponja o una bayeta suave desde arriba hacia abajo y se aclara con agua abundante.