En medio de un gran ruido mediático, político y del mundo económico, Indra continua la marcha. En este nuevo camino que va a emprender, le toca, entre otras cosas, recomponer el consejo de administración con nuevos nombramientos. Es un proceso que no será fulgurante. “Podemos hacer un cálculo aproximado y apuntar a septiembre, después de las vacaciones, como un mes en el que el consejo de administración estará listo”, apuntaron fuentes del mercado que conocen la situación interna de la compañía que preside Marc Mutra.
LOS NUEVOS NOMBRAMIENTOS
Es un camino que va a ir lento, pero seguro, indican estas fuentes. Hay que recomponer un consejo en el que hay treces miembros y hay que reemplazar a consejeros seis independientes y un consejero dominical, aunque con cinco independientes cumpliría con las normas de gobernanza (50% del consejo formado por independientes).
Lo primero es reconstruir las comisiones, sobre todo la de nombramientos y retribuciones. Sin esta no se pueden nombrar los nuevos consejeros. Es una tarea en la que hay que tener en cuenta que han quedado afectadas por las salidas de los consejeros. En el caso de la de nombramientos tiene que estar formada, de conformidad con lo dispuesto en los Estatutos Sociales y en el Reglamento del Consejo, por cinco consejeros no ejecutivos, tres de ellos independientes, entre los que tiene que estar el presidente de la comisión.
el último Consejo antes de las vacaciones será en julio
De este modo, el nombramiento como consejero en representación de la SEPI de Juan Moscoso (ex diputado del PSOE, economista y director de «Deusto Asuntos Globales World Affairs – Strategic Issues» en Deusto Business School), queda aún pendiente. Hay último encuentro del Consejo antes de las vacaciones. Será en julio. Toca esperar para ver cuándo se nombra a Moscoso.
Mientras tanto, ya hay una terna de candidatos para entrar al Consejo que está en la mesa de Indra, según ha sabido MERCA2.
EL NUEVO AIRE Y LA POLÉMICA
Estos consejeros vendrán para dar un nuevo aire al consejo de Indra. La nueva etapa empezó el pasado jueves cuando la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI), máxima accionista de Indra, el grupo vasco SAPA Placencia (de la familia Aperribay; tercer accionista de la empresa) y el fondo Amber Capital (el máximo accionista del Grupo Prisa) tomaron el control del consejo de administración de Indra. La SEPI ya había aumentado su representación en la empresa desde el 18,75% de las acciones hasta el 25%.
LA JUNTA DE INDRA
En la junta de accionistas, Amber Capital logró incluir un punto inesperado: el cese de cuatro consejeros críticos con el mayor control de la SEPI en el consejo de administración: Alberto Terol, Carmen Aquerreta, Enrique de Leiva y Ana de Pro. Los cuatro consejeros fueron cesados con el 53,06% de los votos a favor y el 46,93% en contra. Amber defendió los ceses para dar «una mayor cohesión y estabilidad» al órgano de gobierno. Además, los accionistas rechazaron la renovación de una quinta consejera: Isabel Torremocha, también independiente. A estos se suma la dimisión de Silvia Iranzo, consejera independiente y ex del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
De este modo. el grupo ha conseguido prescindir de los consejeros independientes que no respaldaban que el Estado se implicara aún más en el control de Indra y que habían conformado un bloque para impedir el año pasado que el presidente del grupo, Marc Murtra, asumiera funciones ejecutivas.
EL RUIDO DEL MÁXIMO ACCIONISTA DE PRISA
En cuanto al ruido generado, fuentes del mercado lo atribuyen a la entrada en el accionariado de Amber Capital, máximo accionista de Prisa. “Este ruido terminará pronto. El ruido no ayuda, pero se han dicho barbaridades y si tienen pruebas de que ha habido una concertación de accionistas, lo que tienen que hacer es ir al juzgado”, apuntan fuentes del mercado que conocen bien cómo se mueven los círculos de ataques en todo lo vinculado a Prisa y el Gobierno que encabeza Pedro Sánchez.
En cuanto a la atención que le está prestando al hecho de la salida de los consejeros, fuentes del mercado apuntan que ha habido consideran que “es normal que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) haya dicho que va a estar muy atenta y diga que va a pedir información a Indra sobre lo sucedido, pero como no hay nada, esto va a quedar en nada”, auguran fuentes del mercado. «Ha habido contactos entre la CNMV e Indra, efectivamente», señalan fuentes conocedoras de estos contactos. «En cuanto pase el ruido, el tema quedará en nada porque no hay nada», consideran estas mismas fuentes.
La cuestión es si invertir en Indra es un buen negocio o no lo es
La cuestión que ponen de manifiesto fuentes del sector es si Indra es una buena opción para los inversores o no. Su respuesta es que si porque el mercado de defensa es un mercado pujante y que va a ir a más, por ejemplo en España, donde el Gobierno ha prometido un fuerte aumento del gasto en Defensa, llegando al 2% del PIB. “Más allá de que se ha montado un escándalo agrandado porque ha entrado como accionista el fondo Amber capital, máximo accionista de Prisa y que tiene al mando a Joseph Oughourlian, la cuestión es que Amber entra al accionariado porque Indra es un buen negocio”.
LOS OBSTÁCULOS INTERNOS AL CONSEJO DE INDRA
En este sentido, otras fuentes del mercado defienden que se cesara a «cinco independientes porque estaban obstaculizando en el Consejo la dirección a la que quiere llevar a la empresa la SEPI, es decir el Estado, que es el accionista mayoritario”. Estas fuentes hacen hincapié en la cuestión de que es el Estado, de la mano de la SEPI, y no el Gobierno, en este caso del PSOE, el que es el accionista mayoritario.
ALGUNOS ATAQUES VIENEN POR LAS GANAS QUE LE TIENEN muchos A PRISA y a la parte socialista del GOBIERNO, DICEN FUENTES DEL MERCADO
Lo que dejan caer algunas fuentes consultadas es que los ataques furibundos de parte de algunos medios de comunicación y las vestiduras que se han rasgado algunos analistas y políticos vienen por las ganas que siempre se tienen a Prisa y al Gobierno -cuando el PSOE está en La Moncloa-, por separado y también juntos, pasándoles la factura por la estrecha vinculación de la línea editorial de los medios de Prisa con el PSOE y la influencia del Ejecutivo en este grupo de comunicación. Una relación muy provechosa para ambos.
Si bien este vínculo no es la primera vez que alcanza límites que dejan tocada la independencia de uno y otro. Del Gobierno y del Ejecutivo. Como ejemplo, el veto silencioso del Gobierno a Vivendi para evitar que incrementara su participación hasta un máximo del 29% en Prisa. Fuentes del entorno de Prisa apuntan que Vivendi, al saber que el Gobierno no apoyaba este paso, decidió no intentar la opción.