Apple, Microsoft, Meta y Amazon, cuatro de las siete magníficas, que copan el listado de empresas más valoradas del mundo en la bolsa, están a punto de presentar sus resultados del primer trimestre del año, que suele ser un aliciente bursátil, tanto para subir como para bajar, en base a las previsiones a futuro de sus resultados, normalmente. Pero nada está siendo normal desde de Donald trump ocupa el poder y se balancea en decisiones arancelarias aleatorias. Los ejecutivos de las grandes tecnológicas no van a poder aportar estimaciones sobre sus futuros resultados porque no hay fiabilidad ante la incertidumbre macroeconómica.
Según los analistas especialistas de Bloomberg, los directivos no puedan dar estimaciones con algún grado de confianza ante el desasosiego económico mundial. La última vez que las grandes tecnológicas presentaron sus beneficios, Donald Trump arrancaba su segundo mandato. De aquella, las acciones se dispararon por las expectativas de una agenda gubernamental que parecía que iba a favorecer el crecimiento.
Microsoft, Apple, Meta y Amazon «aterrizarán en un mercado obsesionado con cada giro de una guerra comercial que ha borrado 5,5 billones de dólares en el índice S&P 500
La preocupación, hace apenas tres meses, era el cuándo la ingente inversión hecha en la inteligencia artificial (IA) se iba a convertir en beneficios tangibles. Su mundo ha cambiado y es mucho más oscuro solo tres meses después.
Los resultados trimestrales de esta semana de Microsoft, Apple, Meta y Amazon «aterrizarán en un mercado obsesionado con cada giro de una guerra comercial que ha borrado 5,5 billones de dólares en el índice S&P 500«. Y sí, las preocupaciones sobre la rentabillidad de la IAse ha quedado en un segundo plano. La angustia por la posibilidad de una recesión inducida por aranceles es lo que domina las mentes de los inversores, mientras que los activos refugio como el oro se han convertido en la moneda de moda para los demasiado nerviosos como para comprar acciones a bajo precio.

APPLE, MICROSOFT, META Y AMAZON: INCIERTO FUTURO
Los analistas esperan que las empresas llamadas «Siete Magníficas», que también incluyen a la Alphabet de Google, Tesla y Nvidia «registren un crecimiento medio de los beneficios del 15% en 2025, una previsión que apenas se ha movido desde principios de marzo a pesar del recrudecimiento de las tensiones comerciales», según los analistas.
Según explican en la agencia económica, el dato eleva las apuestas para las cuatro megacapitalizaciones que informan esta semana, que en conjunto tienen una ponderación de casi el 20% en el S&P 500. «Es poco probable que los operadores perdonen la escasez de beneficios en un clima de mercado ya de por sí temeroso, a pesar de las fuertes caídas de los precios de las acciones y de la mejora de las valoraciones», indican. Las «nefastas perspectivas de los gigantes del sector» también serían mal recibidas, sobre todo si refuerzan los temores de que se reduzca el gasto empresarial en el futuro.
El estratega jefe de mercado de Osaic Wealth, Phil Blancato, ve muy claro que esta debilidad de este año en las megacapitalizaciones es una oportunidad de compra, y augura que «cualquier mínima cifra más débil de lo esperado va a provocar una nueva venta masiva debido a la preocupación en torno a los aranceles».
Ya la semana pasada se han conocido datos de cómo está la situación en los mercados de las grandes tecnológicas, y no pinta bien en general. Tesla informó de su peor trimestre en años, aunque los operadores aplaudieron los indicios de que su presidente ejecutivo, Elon Musk, pretende alejarse de su trabajo en el Gobierno y centrarse más en el fabricante de vehículos eléctricos. Alphabet superó las expectativas, pero ofreció escasas orientaciones para el futuro.
En lo que se refiere a los resultados de Meta y Microsoft, que se conocerán este miércoles y producirán las consecuentes reacciones en los días siguientes, sus ejecutivos no han querido predecir cómo podrían afectar los aranceles a sus cuentas de resultados, Wall Street ha estado haciendo sus propios cálculos. Sobre la base de una tasa arancelaria del 22% modelada por Bloomberg Economics, unos márgenes brutos más bajos podrían dar lugar a una contracción de los ingresos netos de alrededor del 7% en 2025 para el S&P 500, en comparación con la actual estimación de consenso de un crecimiento de casi el 12%.
Según el analista de Jefferies Brent Thill, Apple, que es una de las empresas «más expuestas a los aranceles debido a la dependencia de su cadena de suministro de China, puede beneficiarse de un repunte de la demanda por parte de los consumidores que buscan evitar precios más altos». Sin embargo, esas ventas se consideran un beneficio puntual, ya que «los aranceles minarán la demanda en futuros trimestres». Amazon también se enfrenta a riesgos arancelarios en sus negocios de comercio electrónico y publicidad, aunque un golpe a los beneficios podría verse amortiguado por las ganancias en su unidad de servicios web de alto margen,