La trama de Sueños de Libertad no concede descanso a sus personajes; el episodio 286, que se emite hoy, viernes 11 de abril, va a ser un punto de inflexión de varias tramas que siempre tienen con las expectativas de los espectadores.
Con secretos que ya no pueden ocultarse más y batallas personales que pueden poner fin a relaciones, hasta un único episodio puede desplegar una serie de conflictos que tienen como causa decisiones muy drásticas. Mientras que unos personajes se mueren por salvar y conservar su vida, otros personajes no acaban de salvar el amor, la manipulación y la supervivencia.
2UNA BATALLA CONTRA EL TIEMPO

El estado de salud de Luis en Sueños de Libertad va empeorando de manera alarmante y la noticia de que don Fermín no podrá practicarle la intervención lo deja devorado por la angustia y la incertidumbre. Luz, tratando de mantener la tranquilidad, le asegura que buscarán algún otro profesional que realice la operación, pero la sombra del miedo que ya se ha instalado en los ojos de Luis no desaparece.
A cada día que pasa sin un tratamiento, Luis siente que es un día más que asume el riesgo en pos de un resultado incierto, y la frustración contenida que le va devorando por dentro acabará estallando y convirtiéndose en rabia que brota de su interior de manera consciente o incontrolada. La impotencia que lo invade, sintiendo que todo depende de decisiones ajenas, le va ganando; se siente reducido al papel de un mero espectador de su propia tragedia.
Mientras tanto, en los pasillos del hospital, las conversaciones a susurros en torno a la figura de don Fermín avivan la situación. La pregunta que se hacen es ¿hasta qué punto la negligencia de este médico ha hecho presa en otros enfermos? La pregunta flota, pero nadie se atreve a acercarse a ella. La conexión entre Luz y Luis también se va deteriorando.
Ella intenta hacer de su apoyo, pero la angustia de verlo así, sin ser capaz de hacer nada, consume sus entrañas. En un momento de debilidad emocional, Luis llega a preguntarse si vale la pena que siga luchando, lo que hace que afloren unas gotas de terror en el corazón de los que le quieren bien. Mientras tanto, el tiempo sigue avanzando y la esperanza de un milagro médico se hace cada vez más pequeña a la vuelta de cada minuto que pasa.