domingo, 13 abril 2025

Así es el nuevo examen para los conductores de Uber, Cabify y Bolt en Madrid

Ya lo han sufrido la primera tanda de conductores y la próxima lo hará la semana que viene. Los conductores de Uber, Cabify y Bolt en Madrid empiezan a enfrentarse a la nueva exigencia de la Comunidad Autónoma para operar como conductores de VTC: aprobar el nuevo examen que se exige en la controvertida «ley Uber» de Isabel Díaz Ayuso. Es un nuevo paso dentro de las limitaciones que se han puesto sobre la nueva movilidad para que su funcionamiento en Madrid sea compatible con la presencia del taxi. 

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El examen tipo test de 60 preguntas está dividido en 4 partes, como lo informa el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, la primera, de 12 preguntas, está diseñada para confirmar que los conductores manejan el español, la segunda, que consta de 18 preguntas, que son capaces de circular por la ciudad, revisando tanto su manejo de equipos de navegación como el GPS como su conocimiento de la capital además de las normativas sobre mantenimiento del vehículo en cuanto a su efecto en las emisiones de carbono, un punto clave para el sector en España en el futuro inmediato. 

El tercer módulo del examen, otras 12 preguntas, está diseñado para medir los conocimientos de los posibles conductores de atención al cliente, así como de las medidas de accesibilidad de los coches y conocimientos básicos de primeros auxilios. Por último, se revisará el conocimiento de los conductores del marco jurídico que deben cumplir para operar como conductores de VTC en Madrid, en particular los distintivos necesarios, las normativas de arrendamiento de los vehículos y las sanciones que pueden recibir en caso de incumplir alguno de estos reglamentos, este último módulo consta de 18 preguntas. 

Cabify en Madrid. Fuente: Agencias
Cabify en Madrid. Fuente: Agencias

Para aprobar el examen, los posibles conductores tendrán que responder de forma correcta al menos el 50% de cada uno de los módulos del examen. Es importante señalar precisamente que no se trata simplemente de contestar de forma correcta la mitad de las preguntas, sino que debe aprobarse cada uno de los módulos del examen. Es una nueva exigencia que espera evitar que se sigan produciendo problemas, como los accidentes de los conductores que han seguido al GPS a una escalera, o bien que algunos no conozcan el idioma que hablan la mayoría de sus clientes. 

UNA APUESTA DE MADRID PARA PROFESIONALIZAR A LAS VTC

Lo cierto es que la apuesta de Madrid por dejar que las aplicaciones de la nueva movilidad se instalen en la capital ha pasado también por qué estas reciban nuevas exigencias. Aunque Uber, Cabify y Bolt tienen motivos para celebrar las medidas madrileñas cuando las comparan con las de Cataluña, donde se ha hecho casi imposible que operen con su modelo de negocio, la realidad es que también hay nuevas exigencias que no necesariamente existían cuando empezaron a operar en España.

Entre ellas están estos exámenes, o la obligación de trabajar con conductores bajo contrato. Se suma que a medida que ha ido creciendo el sector, esto también ha marcado las exigencias de los conductores, como lo ha marcado la compleja negociación de un convenio colectivo en el sector el año pasado, o la complicada situación de Vecctor, filial de Cabify, para renegociar los acuerdos particulares de sus conductores a través del sindicato.

En cualquier caso, las empresas no deben sorprenderse por este tipo de exigencias. De momento, la principal crítica por el nuevo examen ha venido desde los conductores, aunque no ha sido por el contenido de la prueba, sino por el costo de presentarlo, unos 65 euros, hasta 4 veces el precio de un examen de taxi. Aun así, es evidente que es mucho menos costoso presentarlo que pagar todo lo necesario para operar un taxi que cumpla con las normativas legales de Madrid o del resto de España.

UBER, CABIFY Y BOLT REVISAN EL NÚMERO DE LICENCIAS EN LA CAPITAL

En cualquier caso, es interesante que este examen aparezca mientras que las VTC madrileñas están buscando fórmulas para aumentar el total de licencias del sector en la ciudad. Allí está el informe de KPMG, financiado por Bolt, que asegura que la ciudad no tiene suficientes vehículos de este tipo de empresas y la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que permite a Cabify aumentar sus licencias en la capital. Es un paso que muestra su apuesta en la ciudad. 

Es bueno señalar que no todos en el sector están de acuerdo con esta posición. Evidentemente, los taxistas no quieren más VTC en Madrid, pero la patronal del sector, Unauto VTC, también ha puesto en duda la necesidad de aumentar el número de licencias en una ciudad donde consideran que el mercado está suficientemente equilibrado. 


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