La sopa de ajo es un plato tradicional de la cocina castellana que ha sido un pilar en la gastronomía de España durante siglos. Este sencillo y reconfortante guiso destaca por su sabor robusto a ajo y su capacidad para nutrir. Aunque es un plato que se consume habitualmente a lo largo del año, adquiere un significado especial durante la Semana Santa, cuando muchas personas buscan comidas más ligeras y basadas en ingredientes vegetales debido a las tradiciones de Cuaresma.
En este artículo, exploraremos la historia de la sopa de ajo, los ingredientes que la componen, una receta detallada paso a paso, y sugerencias de acompañamiento que complementarán este delicioso plato.
La sopa de ajo tiene raíces antiguas que se remontan a los tiempos de los romanos y los griegos, quienes ya solían consumir caldos a base de ajo y pan, ingredientes que eran comunes en la dieta de las clases más humildes. A medida que las costumbres culinarias evolucionaron, la sopa de ajo fue ganando popularidad en la Península Ibérica, especialmente en la región de Castilla.
Este plato es conocido por su simplicidad y economía, lo que lo convierte en una opción ideal para las familias rurales. Durante la Semana Santa, la tradición de no consumir carne ha llevado a que la sopa de ajo se convierta en una opción habitual en muchas mesas. Esta sopa también es valorada por sus propiedades reconfortantes y nutritivas, ideal para la época de primavera donde, a menudo, las noches todavía son frías.
1Ingredientes para la sopa de ajo

– Ajos:
– 6-8 dientes de ajo, pelados y fileteados
– Pan:
– 200 g de pan del día anterior (preferiblemente pan de hogaza o de pueblo)
– Caldo:
– 1 litro de caldo de verduras (también se puede utilizar caldo de ave para una versión no vegetariana)
– Huevos:
– 2 huevos (opcional, para añadir proteína y enriquecer el plato)
– Aceite y especias:
– 4-6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
– 1 cucharadita de pimentón dulce
– Sal al gusto
– Pimienta al gusto
Ingredientes opcionales
– Para dar más sabor:
– 2-3 rebanadas de jamón serrano o chorizo, cortadas en trozos (opcional)
– Hierbas frescas como perejil o cilantro para decorar