¿Estás tomando omeprazol o algún otro inhibidor de la bomba de protones (IBP)? Pues la OCU acaba de lanzar una alerta que va a hacer que repenses muy seriamente tu tratamiento. Si eres de los que se siente tentado a tomar estos medicamentos para controlar el reflujo o la acidez, mejor sigue leyendo antes de que sea demasiado tarde…
En los últimos años, el consumo de omeprazol y otros IBP ha aumentado mucho. Casi todo el mundo recurre a ellos para tratar problemas gástricos sin pensarlo dos veces, pero lo que no saben es que estos fármacos pueden ser mucho más peligrosos de lo que parecen. Y lo peor de todo es que muchas veces se toman sin la supervisión adecuada de un médico.
2¿Qué son realmente los inhibidores de la bomba de protones?

Los IBP no son lo que parece. A pesar de que mucha gente los llama “protectores gástricos”, en realidad no actúan formando una capa protectora sobre el estómago. Su función principal es reducir la producción de ácido gástrico, y si no se usan correctamente, pueden alterar el equilibrio natural de tu sistema digestivo.
Entre los más conocidos están el omeprazol, esomeprazol, pantoprazol y rabeprazol. Lo curioso es que, aunque algunos de estos fármacos están disponibles sin receta en dosis pequeñas, la OCU advierte que su uso sin control médico puede generar más problemas que soluciones.