María del Monte y su mujer, Inmaculada Casal, se enfrentan a una de las pérdidas más dolorosas de sus vidas tras el fallecimiento de Francisco Baena Bocanegra, abogado penalista y amigo cercano de la cantante. Bocanegra, quien tenía 82 años, falleció después de una lucha prolongada contra problemas de salud, dejando un vacío irremplazable en la vida de la tonadillera y su entorno más cercano. A pesar de que la familia de María del Monte ha tenido que enfrentar diversos contratiempos en los últimos años, la muerte de Francisco ha llegado como un golpe devastador.
2El momento más duro de María del Monte

Aún sin recuperarse de esta tragedia, en mayo de 2021, otro golpe la sacudió cuando falleció el hermano de Inmaculada Casal, Juan Carlos, quien también perdió la vida debido al Covid-19. «Era un ser querido para María, y el dolor fue indescriptible», confesaron algunas personas cercanas a la pareja. Esta nueva pérdida fue especialmente devastadora para Inmaculada, quien había perdido a otro ser querido en un periodo muy corto de tiempo.
La tragedia no terminó ahí, ya que, en agosto del mismo año, María tuvo que despedirse de su madre, Bibiana Algaba, a los 96 años. A pesar de que la familia estaba esperando este desenlace, ya que la matriarca había estado enferma durante un tiempo, la noticia de su partida fue igualmente dolorosa. «No por esperada es menos dolorosa. Estaba malita desde hace mucho tiempo pero se ha ido dando vida», comentó la presentadora Toñi Moreno, quien también expresó su apoyo a María en ese difícil momento. «María la ha tenido súper protegida. Ha vivido por y para su madre. María lo va a pasar mal, nunca ha llegado a superar la muerte de su padre y lo va a pasar mal. Necesita que la apoyemos. Ella sabe que la quiero, le mando todo el cariño y todo el amor», dijo la presentadora en ese entonces.
Sin embargo, a pesar de las tragedias personales que ha enfrentado, María del Monte ha encontrado un rayo de esperanza en la importancia de la salud. En su participación en ‘El show de Bertín Osborne’, la cantante reflexionó sobre lo que la vida le ha enseñado en estos años de dolor. «Si quisiera comprar un día de vida con todo el dinero del mundo no podría, cuando tienes el privilegio de estar sano… Estoy bien sin entrar en detalles, en la vida hay que arrancar, hay que vivir, y la vida te da sorpresas. Pero si hay salud, ves que todo lo demás tiene arreglo, he tenido la experiencia de ver cómo personas muy importantes para mí se iban y no podía hacer nada. Después de eso ahora todo está por debajo, la nota de corte está ya está baja«, compartió, dejando claro que, a pesar del sufrimiento, valora más que nunca lo que realmente importa: la salud y la oportunidad de seguir adelante.