La eSIM y sus posibilidades, entre otros campos en el crecimiento de la tecnología IoT, van a ser claves para acelerar su adopción por parte de las telecos como Telefónica, MasOrange, Vodafone y las OMV, aunque como nueva tecnología tiene sus pros y sus contras. Las eSIM, frente a la tarjeta SIM física, permite la interoperabilidad y es reprogramable, funciona bien con máquinas, permite conectar múltiples dispositivos, elimina el coste de fabricación y distribución de las tarjetas físicas, no ocupa espacio y no se puede robar. Por contra, es capaz de cambiar la «dinámica de fidelización y abandono» de los clientes, y todavía no está rindiendo en el IoT, donde sería más que rentable.
La eSIM presenta los aspectos positivos descritos para la industria de las telecos, pero todavía plantea retos que no le confieren la rentabilidad que se le presume a esta tecnología. Según se reconoce en un informe de la patronal de las telecos a nivel mundial, GSMA, «Sí, la eSIM sigue siendo una tecnología minoritaria. Pero sin duda está en alza». El año pasado, una encuesta de la organización reveló que aproximadamente la mitad de los operadores tienen una base de usuarios de eSIM inferior al 10%. Ahora, en 2025 esta cifra ha descendido al 36%.
la eSIM sigue siendo una tecnología minoritaria que está en alza, aunque el año pasado aproximadamente la mitad de los operadores tenían una base de usuarios de eSIM inferior al 10%
No obstante, el informe que se ha realizado con la colaboración de las telecos a nivel mundial, indica que en consonancia con la tendencia de mayor implementación de eSIM, también existe «un mayor interés en el formato entre los consumidores«. Si bien el 37% calificó la demanda como «neutral», el 45% la calificó como «moderadamente alta». «Esto representa ocho puntos porcentuales más que el año pasado. Solo el 6% calificó la demanda como muy baja», apunta el informe en tono más positivo.
Así, la mayor parte de los responsables y expertos en telecomunicaciones se plantean que si el software está «devorando» tantos productos físicos en otros ámbitos de la vida, sí se puede esperar que la eSIM finalmente deje de ser intercambiable. El 32% de los consultados estima que en menos de tres años la eSIM se habrá generalizado, mientras que el 49% cree que el periodo va a ser más largo, entre tres y cinco años. Uno de cada cinco cree que tardará más de cinco años todavía.

LA eSIM Y LA RETENCIÓN DE CLIENTES
En el informe se pone negro sobre blanco que el mayor desafío que enfrentan las telecos al adoptar la tecnología eSIM es la falta de conocimiento o comprensión de la tecnología eSIM, que es puro software, por parte de los consumidores. Según el 44% de los especialistas de las telecos, los usuarios puede que no están preparados para la eSIM, y la siguiente barrera es la integración técnica de esta tecnología, según el 21%. Un 19% temen los problemas relacionados con la regulación o el cumplimiento normativo y, aunque este temor se da en menor medida, el 12% ve problemas en los costes de su implementación.
Sin embargo, también hay temor ante los retos en lo que a la retención de los clientes se refiere. La eSIM podría facilitar el cambio de operador entre suscriptores, o el equilibrio de poder de los operadores móviles a los fabricantes de dispositivos y otros proveedores de servicios. No obstante, las operadoras están virando sus recelos en este sentido, puesto que el 60% de los responsables de las telecos cree que tendrá un impacto positivo fuerte o moderado en la retención de clientes, y ya solo el 13 % cree que será negativo.
hay temor ante los retos en lo que a la retención de los clientes se refiere. La eSIM podría facilitar el cambio de operador entre suscriptores, o el equilibrio de poder de los operadores móviles a los fabricantes de dispositivos y otros proveedores de servicios
Y en el «negocio» en el que sí está triunfando esta nueva tecnología es en el roaming, puesto que se ha producido un reciente desarrollo en el sector de las eSIM para viajes, porque ofrece conectividad flexible a los viajeros, y elimina la necesidad de depender de los servicios de roaming tradicionales o de comprar tarjetas SIM locales en su destino.
Los expertos de las empresas de telecomunicaciones mostraron una tendencia positiva en cuanto a cómo les van a afectar estos productos a los ingresos por roaming. El 60% cree que la eSIM tendrá un impacto moderado o muy positivo en este servicio, mientras que solo el 15% cree que será negativo, aunque es difícil entender por qué, al menos desde el punto de vista de los consumidores.
En definitiva, GSMA ha podido constatar que la adopción de la eSIM se está acelerando, pero «persisten importantes desafíos». La demanda de los consumidores está en aumento, pero su penetración generalizada aún está en desarrollo. Así que la capacidad de integrar la eSIM a gran escala sin problemas, abordar las deficiencias de conocimiento de los consumidores y simplificar la activación definirá la siguiente fase de crecimiento.
A medida que la eSIM pasa de su adopción temprana a la generalización, los proveedores más vanguardistas ya se preparan para un panorama donde la flexibilidad, la interoperabilidad y la automatización son primordiales. Este cambio no se limita a la conectividad, sino a la creación de un ecosistema de telecomunicaciones más inteligente y ágil que satisfaga las necesidades cambiantes de empresas y consumidores.