El control de velocidad en las carreteras es una de las prioridades de la DGT para reducir la siniestralidad y mejorar la seguridad vial. En los últimos años, los radares han evolucionado considerablemente, incorporando nuevas tecnologías que los hacen más precisos y efectivos.
Uno de los sistemas más innovadores que ha llegado recientemente a España es el radar remolque, un dispositivo que ha demostrado su eficacia en Francia y que ya está operando en varias carreteras del país. Su principal ventaja es que puede moverse de un lugar a otro sin necesidad de instalaciones fijas, lo que permite a las autoridades cubrir un mayor número de puntos estratégicos.
5Los radares móviles que multan en múltiples carriles

La DGT ha anunciado una inversión de 975.000 euros en la adquisición de 15 nuevos radares móviles con capacidad para detectar infracciones en hasta seis carriles al mismo tiempo. Esta nueva tecnología amplía la capacidad de control del tráfico y permite sancionar a un mayor número de vehículos sin necesidad de aumentar el número de dispositivos instalados.
Estos radares móviles pueden colocarse en puentes, postes elevados o incluso vehículos policiales, lo que les otorga una gran versatilidad. Su implementación responde a la necesidad de reforzar la vigilancia en carreteras de alta densidad de tráfico.