La progresiva implantación del teletrabajo y el auge del turismo en España contribuyen a que prosiga la transformación de edificios de oficinas en hoteles, tal y como va a ocurrir con un edificio sito en Alicante que se encontraba en desuso.
La consultora inmobiliaria Colliers ha asesorado la venta de un edificio de oficinas que se convertirá a uso hotelero. El vehículo de inversión Iris Costablanca se ha hecho con un inmueble propiedad de un family office valenciano que está situado en la calle Bazán 57 y tiene una superficie total construida de 1.139 metros cuadrados.
A ello ha ayudado el tirón que goza Alicante, que en el verano de 2024 tuvo una ocupación hotelera del 88% y un ingreso medio obtenido por la ocupación de una cada habitación de hotel vendida en un día de 133 euros.
La gestora Be Alicante operará el nuevo hotel, que sumará 28 nuevas habitaciones a la oferta de mediana escala de la ciudad de la Comunidad Valenciana. «La combinación de una elevada ocupación, el incremento de las tarifas y la limitada disponibilidad de hoteles, en contraste con la proliferación de apartamentos turísticos, ha impulsado el interés inversor en la conversión de activos inmobiliarios en establecimientos hoteleros», explica Colliers.
El director de su oficina Rafael Paz dice que «Alicante se ha posicionado como un destino de referencia en el sector turístico español, no solo por su oferta de sol y playa, sino también por su creciente atractivo para el turismo cultural, gastronómico y de negocios. La desestacionalización y el crecimiento sostenido de los últimos años han convertido a la ciudad en un mercado muy interesante para la inversión hotelera».
«A ello se suma el bajo stock de hoteles en comparación con la creciente demanda, lo que genera oportunidades únicas para proyectos como la transformación de este inmueble en un hotel boutique. Además, las perspectivas son buenas para todo tipo de turismo debido a la ampliación del aeropuerto y la futura construcción del centro de congresos, que incentivará especialmente el segmento MICE, consolidando aún más la posición de Alicante como un destino versátil y competitivo», añade.
Be Alicante, que está especializada en la gestión de hoteles boutique y bloques de apartamentos turísticos, operará el nuevo establecimiento. Su director general Juan Fernando Lozano se ha mostraedo feliz por «poder gestionar este nuevo establecimiento junto a Iris Costablanca Inversiones, un colaborador y partner de confianza». «Nuestro objetivo es que este proyecto sume al atractivo turístico de Alicante y aporte valor a la comunidad», añade.
LA TRANSFORMACIÓN SE MANTIENE COMO TENDENCIA
Un informe de la consultora CBRE que afirma que el volumen de inversión en el segmento de la reconversión se triplicó en el Estado español en el último año, pasando de 300 millones en 2023 a más de 900 millones en 2024, con más de 400.000 metros cuadrados de activos en proceso de cambio de uso. Más del 60% de estas operaciones provienen de oficinas reconvertidas en Living y hotelero.
CBRE identificó 46 cambios de usos a nivel nacional en los nueve primeros meses del año, por encima de los casi 30 del mismo periodo de 2023, lo que supone un aumento del 60%. En términos de superficie, esto se traduce en más de 240.000 m2 que han iniciado un proceso de transformación este año. Los cambios de usos se están viendo impulsados en la actualidad por la alta demanda turística y residencial.
«Del total de cambios identificados, el 85% de las reconversiones tienen como uso final Hoteles y Living. En concreto, el sector Hoteles es el gran protagonista representando casi la mitad del total y destacando las transformaciones a producto de lujo. En segundo lugar se encuentra el sector Living con el 38%», explican.

María Mayoral, Head de Multistrategy y Senior Director de Investment Properties de CBRE, afirma que «dar una segunda vida a los edificios se convierte en una de las grandes tendencias en el sector inmobiliario, acelerada actualmente por la alta demanda turística y residencial, con el objetivo de alcanzar todo el potencial de los activos, dar respuesta a nuevas tendencias sociodemográficas y generar valor a partir de una gestión mucho más activa y profesional».
Según CBRE, se trata de una tendencia creciente que puede contribuir a resolver algunas problemáticas actuales como la falta de suelo, la escasez de oferta residencial o la necesidad de un parque inmobiliario más sostenible y eficiente.