Empresas como GMV, Airbus, Indra y otras dedicadas a la fabricación y venta de productos aeroespaciales y satelitales están captando talento joven STEM a marchas forzadas. Siempre este tipo de empresa, en las que los trabajos de todo tipo de ingenierías son capitales, han buscado a los y las mejores mediante headhunters, y también en las facultades universitarias, donde se fijaban en algún cerebrito. La digitalización de la sociedad española, la aparición de tecnologías disruptivas como la Inteligencia Artificial (IA), el aumento de la inversión en tecnología y comunicaciones y ahora el contexto internacional han aumentado y mejorado significativamente las ofertas laborales de unas empresas sedientas de un talento que escasea.
Jorge (nombre figurado de joven madrileño real) tiene 22 años y está a punto de acabar su Trabajo Fin de Grado (TFG) en Ingeniería de Sistemas Informáticos. Le han contratado en GMV, con excelentes condiciones económicas que avanzarán a pasos agigantados en cuanto esté graduado, 2.000 euros más al año, y seis meses después otro aumento similar, hasta alcanzar los 28.000 euros anuales.
los perfiles junior son competitivos y se apuesta para captarlos por la formación, con buenas retribuciones económicas, porque si no se van otras empresas, ofreciendo plan de carrera, crecimiento, buen clima laboral,y teletrabajo y conciliación, porque quieren trabajar para vivir
Nada mas incorporarse a la compañía, le han facilitado una formación especializada en el área STEAM concreta en la que va a trabajar, de esa que solo se recibe si se hace un master aparte. Y con calma, le van a enseñar a hacer su trabajo (telecomunicaciones, ciberseguridad, sistemas de TI, IA, Big Data… dónde haga falta).
Otro amigo de la facultad de Jorge, David (también figurado), acaba de entrar de becario. Y están llamando a más gente de la facultad. Sus novias y resto de amigos, que estudian también ingenierías (de software, por ejemplo) consiguen prácticas en cuanto se asoman a LinkedIn. La economía española va como un cohete, y el paro ha descendido, aunque el juvenil, no tan deprisa. Pero los chavales y chavalas que estudian una ingeniería, las empresas se los rifan.
GMV es una empresa situada en la madrileña localidad de Tres Cantos que diseña «el futuro a través de la tecnología», fundada en 1984, que trabaja en el diseño de soluciones en sectores como el «aeroespacial, defensa, Sistemas Inteligentes de Transporte, movilidad, ciberseguridad y tecnologías digitales», que cuenta con más de 1.800 empleados que trabajan en el sector espacial «lo que supone el 2,4% de todo el personal de la industria espacial europea», ha puesto en marcha más de 900 satélites y vehículos espaciales, es el primer proveedor mundial de centros de control de satélites y el sexto grupo industrial del sector espacial europeo, tras Airbus, ThalesAlenia, Ariane, Leonardo y OHB.
si hasta ahora el negocio satelital, aeroespacial, del espacio y de la defensa, o de la guerra (sin disimulos) necesitaba talento, a partir del momento actual geopolítico nuestros jóvenes talentos son un tesoro
Con estas y con otras empresas como Indra, y más pequeñas como PLD Space, Deimos o Alen Space, por poner algunos ejemplos, anda dándose codazos para encontrar talento entre nuestros jóvenes, y para formarles y especializarles. Es así porque si hasta ahora el negocio satelital, aeroespacial, del espacio y de la defensa, o de la guerra (sin disimulos) necesitaba talento, a partir del momento actual geopolítico nuestros jóvenes talentos son un tesoro.
Esto es así tras la pandemia, con la guerra de Ucrania y el conflicto palestino-israelí, la llegada de Trump que ha dejado de ser el amigo defensor de Europa, la puesta de perfil de la OTAN, el acecho de Putin, y el tirón de orejas del informe Draghi sobre cómo debe espabilar Europa.
GMV hace cuatro días publicaba en LinkedIn «¡Estés donde estés, queremos conocerte! 🤩 Madrid, Vigo, Varsovia… No importa dónde estés, lo que importa es tu talento y tu impulso para crecer. 🚀 Si estás buscando una oportunidad para poner en marcha tu carrera profesional, tenemos un lugar para ti», y explicaban que esta semana, asistirían a varios eventos de talento como el Foro Empleo Universidad Complutense de Madrid, el Foro Tecnolóxico de Vigo o el Targi Pracy 2025 (Inżynierskie Targi Pracy PG ) de Varsovia.
Ahora mismo la compañía ofrece 237 vacantes, alguno relacionado con la comunicación o los asuntos legales, pero sobre todo piden ingenieros de ciberseguridad, de software, de lenguaje C++, Java o algoritmos de Python, de infraestructura de Cloud, de dinámicas de vuelo, de navegación, de robótica, de satélites de observación terrestre, IA, para proyectos cuánticos… la mayoría para Tres Cantos, pero muchos para Baviera (Alemania), Varsovia, Bucarest o Lisboa, y algunos para Sevilla.
Si miramos en Airbus, busca ahora 300 personas en todo el mundo con perfiles similares, 72, por ejemplo, en Madrid. Hay 199 vacantes en Indra también en Madrid, en Bruselas, en Riad, en Latinoamérica y hasta en Filipinas. Muchos de los ingenieros que busca PLD Space, con 30 ofertas, tendrían que trabajar en Elche, donde tiene su sede. Deimos, también dedicada a la investigación y la tecnología espacial, busca 19 personas, y su sede está también en Tres Cantos, y Sener tiene 57 vacantes por todo el país. Y si mirásemos los puestos ofrecidos por cada una de las empresas que pertenecen a la Asociación de Empresas de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio (TEDAE), no se acababa el artículo.

GMV, UN EJEMPLO DE TODO UN SECTOR
Cristina Guinea, manager de RRHH, y Carla Rodríguez, team lead de RRHH para el sector Aeroespacial y de Defensa, ambas de Akkodis, la empresa de consultoría tecnológica e ingeniería global líder en la Smart Industry del Grupo Adecco corroboran que el sector está generando mucho empleo joven y de calidad, que en España falta talento, que se busca casi en las puertas de las facultades y que se les forma porque las nuevas tecnologías van más rápidas que las universidades y que la actualización formativa de los compañeros seniors con experiencia que ya trabajan en las compañías.
Guinea confirma que el sector y su empleo en España ha cambiado, por múltiples factores y algunos muy globales: «La guerra de Ucrania, los ataques de ciberseguridad por parte de Rusia y otros países han conseguido que estén cada vez más demandados esos perfiles de telecomunicaciones, de informática, de satélites y de drones. Y hay mucha gente más senior que no está preparada, o que no está al día en esas tecnologías, y los junior no tiene la experiencia, pero sí esos conocimientos».
En España se está viviendo un repunte en torno a la innovación que es transversal. Ahora mismo hay un nivel muy alto de demanda de estos perfiles de ingeniería tecnológica. Y no es que haya pocos, sino que lo que hay es mucho trabajo
«Se reclutan ingenieros e ingenieras, principalmente, y muy jóvenes, porque así se moldean los futuros expertos, se les adapta a las metodologías y al tipo de proyecto demandado por el mercado. Contratar a los más jóvenes les permite estar a la cabeza de la innovación», nos explican ambas expertas. Y nos confirman que se buscan ingenieros «de telecomunicaciones, aeroespaciales, software, industriales, electrónicos, de sistemas, y son personas próximas a acabar el grado casi siempre».
También aseguran que el sector bulle con la situación geopolítica desde la pandemia hasta la inquietante actualidad. En 2024, en torno al 25% de la oferta de empleo que demanda titulados universitarios es para profesiones relacionadas con el ámbito STEM. Carla Rodríguez reconoce que el sector aeroespacial, satelital y de la defensa «está ahora en una fase de transformación, de máxima digitalización, porque ha cambiado forma en el que se diseña, se desarrolla, se prueban y se operan los sistemas aeroespaciales, donde se ha incorporado todo lo que tiene que ver con IA, con Big Data y nuevas telecomunicaciones».
el sector aeroespacial, satelital y de la defensa «está ahora en una fase de transformación, de máxima digitalización, donde se ha incorporado todo lo que tiene que ver con IA, con Big Data y nuevas telecomunicaciones»
Se demandan ingenieros no solo dentro del sector aeronáutico. «En España se está viviendo un repunte en torno a la innovación que es transversal. Ahora mismo hay un nivel muy alto de demanda de estos perfiles. Y no es que haya pocos, sino que lo que hay es mucho trabajo», explica Cristina Guinea.
La creciente inversión en defensa va a ser también disruptiva «al tratarse de un sector que es muy puntero y que demanda a muchos profesionales, la verdad, hay mucho trabajo para nosotros, los que reclutamos, formamos y ofrecemos su talento a las empresas. Tenemos mucho volumen de contratación en este tipo de empresas, tanto en civil como en defensa», y explica que sus clientes por antonomasia son, por ejemplo, Airbus, Thales, GMV, Indra, Tecnobit de Oesía.
Se trata en cualquier caso de un mercado «muy competitivo -asegura Rodríguez- casi un mundo paralelo a resto del mercado laboral. Y con los perfiles junior son competitivos apostando por la formación, ofreciéndoles buenas retribuciones económicas, porque si no se van otras empresas, ofreciendo plan de carrera, crecimiento, buen clima laboral, teletrabajo y conciliación, porque quieren trabajar para vivir».
Akkodis Academy es un programa de capacitación para nuevos talentos orientado a potenciar el conocimiento de tecnologías disruptivas dentro de diferentes ámbitos de la ingeniería (Aeroespacial y Defensa, Ferroviario, Ingeniería de sistemas, etc). Con una duración aproximada de 1.200 horas y de la mano de profesionales de Akkodis, los jóvenes talentos tienen la oportunidad de adquirir conocimientos específicos del área, soft y hard skills a través de formaciones que impulsen sus capacidades y aprender cómo es el trabajo en un proyecto real antes de incorporarse de lleno a él.