El mundo de la alimentación está lleno de tendencias y modas que prometen resultados milagrosos. Contar calorías, medir cada gramo de comida y seguir dietas restrictivas parecen ser las únicas formas de mantenerse en forma. Sin embargo, existe un enfoque diferente que está ganando popularidad: comer menos sin sacrificar la calidad nutricional.
El secreto no está en la cantidad, sino en la calidad y en la forma en que combinamos los alimentos. La llamada alimentación minimalista propone una forma más simple de comer, evitando los ultraprocesados y apostando por comidas más ligeras pero igualmente nutritivas. Si alguna vez has sentido que comes demasiado sin necesidad, estos trucos te ayudarán a comer menos y sentirte mejor.
2La alimentación minimalista como solución

Cada día aparecen nuevas dietas que prometen ser la clave definitiva para una alimentación saludable, pero muchas de ellas requieren un esfuerzo innecesario. En este sentido, la alimentación minimalista propone simplificar lo que comemos, evitando combinaciones complejas y centrándose en lo esencial.
Este enfoque consiste en reducir la cantidad de alimentos en cada comida con el objetivo de mejorar la digestión y absorber mejor los nutrientes. Al prescindir de ingredientes superfluos y optar por combinaciones sencillas, es posible comer menos sin afectar el bienestar general.