Las normas de tráfico no solo afectan a los conductores, sino también a los peatones. Aunque muchas personas creen que pueden moverse con libertad sin preocuparse por sanciones, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha decidido endurecer las multas a quienes no respeten las señales viales. A partir de ahora, cruzar con el semáforo en rojo no será una simple imprudencia, sino una infracción que puede costar hasta 200 euros.
Esta nueva medida busca concienciar a los peatones sobre la importancia de respetar las normas de tránsito. El objetivo no es solo evitar sanciones económicas, sino reducir el alto número de accidentes que se producen cada año por la falta de atención y el incumplimiento de las señales viales.
3El uso del móvil, una de las causas principales de accidentes

Uno de los principales motivos por los que los peatones no respetan las señales de tráfico es el uso del teléfono móvil mientras caminan. Mirar el dispositivo en lugar del entorno aumenta el riesgo de no percatarse de los semáforos, los pasos de cebra o los coches que circulan.
La DGT ha alertado de que esta distracción es ya un problema de seguridad vial grave. A pesar de que muchas personas creen que pueden caminar y usar el móvil sin riesgos, la realidad es que esta práctica ha sido señalada como una de las principales causas de atropellos en entornos urbanos.