Ubicada en un enclave privilegiado en el norte de España, Potes es una pintoresca localidad que se ha ganado el título de «Capital Lebaniega». Este encantador pueblo, rodeado de montañas y exuberante naturaleza, es el acceso principal a la impresionante comarca de Liébana, un lugar que atrae tanto a turistas nacionales como internacionales por su belleza y su rica historia. En este artículo, exploraremos la historia, la cultura, la gastronomía, y las maravillas naturales que hacen de Potes un destino imprescindible en Cantabria.
1Historia de Potes

La historia de Potes se remonta a tiempos muy antiguos, con vestigios que indican la presencia humana en la zona desde la época prehistórica. La localidad ha sido un cruce de caminos a lo largo de los siglos, conectando diversas regiones y culturas. Durante la Edad Media, Potes floreció gracias a su ubicación estratégica y se convirtió en un importante centro comercial.
Uno de los hitos históricos más significativos de Potes es la fundación del Monasterio de Santo Toribio de Liébana en el siglo VI. Este monasterio es famoso por albergar una de las reliquias más veneradas del cristianismo: el Lignum Crucis, que se dice es un trozo de la cruz de Cristo. La importancia religiosa del monasterio ha atraído a numerosos peregrinos a lo largo de los siglos, lo que ha contribuido al desarrollo de Potes como un centro cultural y espiritual.
A lo largo de la historia, el pueblo ha preservado su patrimonio arquitectónico, con calles empedradas, casas de estilo montañés y edificios históricos que reflejan la rica herencia cultural de la región.