Merca2 ha hablado con María Díaz directora de Operaciones y Mantenimiento de Iryo en la Semana Internacional de la Mujer
Pregunta: María, tu formación académica y profesional te ha llevado a un puesto de gran responsabilidad en el sector ferroviario. ¿Qué estudios y experiencias previas has tenido y consideras que te han sido más útiles en tu camino profesional?
Respuesta: Soy ingeniera industrial y casi toda mi carrera ha estado ligada a la alta velocidad desde sus inicios en España. Me voy a remontar a 1992. Aquel año comencé a trabajar en Alstom en el mantenimiento del primer ferrocarril de alta velocidad. Fue una oportunidad increíble, un sueño hecho realidad. Nunca olvidaré el día en que entré en el taller y me encontré de frente con el tren S-100… era impresionante, ¡fue un flechazo!
Doce años después, trabajé en Nertus y, más tarde, en Actren, donde afronté el reto de gestionar el mantenimiento de los trenes de ancho variable. Etapas distintas que, entre todas, suman. Porque lo más valioso ha sido aprender a liderar equipos y comprender, al detalle, la operativa de este complicado sector.
Cuando miro atrás siento que todo ha pasado muy deprisa, pero ha sido un largo camino, no exento de complicaciones. Imagina en aquellos tiempos…yo era una mujer en un mundo de hombres. Y comencé en el lugar menos imaginable, trabajando con una beca en una mina de carbón.
(P): Como has comentado, se trata de un sector que históricamente ha tenido una mayor presencia masculina. ¿Cómo lo has vivido tú y qué desafíos has tenido que enfrentar a lo largo de tu carrera?
(R): Desde la universidad, donde éramos solo tres mujeres en una clase de más de cien alumnos, he estado rodeada mayoritariamente de hombres. Nunca he vivido ninguna situación especialmente desagradable, pero sí he sentido durante muchos años, especialmente en mis inicios, que tenía que demostrar más, simplemente por el hecho de ser mujer, para ganarme el respeto de mis compañeros y superiores. Recuerdo entrevistas en las que se me insinuaba que, ser mujer, podía ser un impedimento. Siempre he demostrado mi valía trabajando en continua formación, con perseverancia y pasión.
No fue una sensación pasajera. Años después, en reuniones cotidianas, seguí viviendo esa sensación de tener que demostrar que sabía de lo que hablaba, para superar el inicial escepticismo de los demás.
(P): Actualmente, eres directora de Operaciones y Mantenimiento de iryo, uno de los principales operadores de Alta Velocidad en España. ¿Cómo llegó esta oportunidad y cuál es tu rol principal?
(R): Entré en iryo en 2021 como jefa de Mantenimiento tras más de 30 años en otras empresas del sector. Para mí, ha sido un crecimiento profesional muy importante. He pasado del mantenimiento a través de otras compañías, a gestionar directamente la operativa de los trenes.
En iryo, lidero a un equipo de 200 personas, incluyendo maquinistas, personal de mantenimiento y el personal de la sala de control. Nuestro trabajo es asegurar que nuestros trenes operen con la mayor puntualidad, eficiencia y seguridad. Y lo conseguimos. Estoy muy orgullosa de todos ellos.
(P): ¿Qué habilidades específicas consideras clave para tener éxito en tu rol? ¿Cómo te enfrentas a las decisiones estratégicas en tu área?
(R): Sin duda, el liderazgo y la comunicación son fundamentales. Gestionar equipos grandes y garantizar que todo funcione requiere confianza en los empleados, claridad en la comunicación y capacidad para tomar decisiones rápidas. También es esencial la capacidad de análisis y la toma de decisiones basada en datos, no en intuiciones, porque cada minuto cuenta en la operativa ferroviaria. Y no nos podemos equivocar.
(P): A día de hoy, ¿cómo valoras la presencia de las mujeres en el sector ferroviario y, en concreto, en áreas como las operaciones y el mantenimiento? ¿Qué cambios has visto en los últimos años y qué te gustaría ver en el futuro?
(R): Echo de menos más mujeres en el sector. Hemos avanzado mucho, pero todavía hay pocas, especialmente en áreas técnicas y de operación. En iryo, por ejemplo, ya tenemos mujeres maquinistas y en puestos clave como la jefatura de Operaciones, pero siguen siendo una minoría. Me gustaría que cada vez más mujeres vieran este sector como una opción atractiva. La diversidad aporta mucho a los equipos y estoy segura de que, en el futuro, contaremos con más presencia femenina en estas áreas.
Para que eso suceda, hay que trabajar desde el principio, desde la escuela, para que las niñas disfruten imaginándose protagonistas de este mundo apasionante. Porque nada, absolutamente nada, está fuera de nuestro alcance.
(P): Para las mujeres jóvenes que tienen interés en carreras en un campo tradicionalmente dominado por hombres, ¿qué consejo les darías para tener éxito y no rendirse ante los obstáculos que puedan encontrar en el camino?
(R): Les diría que no digan que no a nada, que sean constantes y que luchen por lo que quieren. El mundo ferroviario es apasionante y hay sitio para todas. Es un sector en el que cada día es diferente y en el que puedes ver el impacto directo de tu trabajo. Desde el inicio de las operaciones en noviembre de 2022 hasta hoy hemos trasladado a más de 15 millones de pasajeros, garantizando puntualidad y confort. Formar parte de la cadena de valor que lo hace posible produce una enorme satisfacción.
También les diría que busquen apoyo en sus compañeras y que nunca duden de su valía. Si algo me ha enseñado mi carrera es que la perseverancia y la pasión son las claves del éxito. Si te gusta este mundo, hay en él un sitio para ti. Lúchalo.
