Un paté de pollo bien hecho en casa es una delicia para untar. ¿Te gustaría sorprender a tu familia con un delicioso paté de pollo casero? ¡Estás en el lugar adecuado! Esta receta es súper fácil de hacer, económica y, lo mejor de todo, ¡está increíblemente sabrosa! Ideal para rellenar sándwiches, bocadillos o acompañar con unas tostaditas. Además, puedes hacerla en poco tiempo y disfrutar de una versión mucho más sabrosa y saludable que la comercial.
En este post te vamos a contar todo lo que necesitas saber para hacer este paté de pollo casero irresistible. Vamos a preparar esta receta con ingredientes simples y muy accesibles. ¡No te la pierdas!
3Aquí está la guía definitiva para elaborar el paté de pollo casero
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Carameliza la cebolla. Lo primero que tenemos que hacer es caramelizar la cebolla. Para ello, cortamos los 60 g de cebolla en trozos pequeños y los ponemos en una sartén grande con 30 g de mantequilla a fuego muy bajo. Lo ideal es que la cebolla se cocine lentamente para que se liberen todos sus azúcares naturales, lo que le dará un sabor dulce que complementará perfectamente al pollo. Cocina la cebolla durante unos 10 minutos, removiendo de vez en cuando para evitar que se queme.
Cocinar el pollo. Una vez que la cebolla esté caramelizada, agregamos los 200 g de pechuga de pollo cortados en daditos a la sartén. Continuamos cocinando todo junto durante unos 10 minutos adicionales, removiendo de vez en cuando. Este paso es muy importante, ya que queremos que el pollo tome todo el sabor de la cebolla caramelizada y se vuelva tierno. Si prefieres hacer esta receta con pollo asado ya cocinado, solo será necesario calentar la mezcla durante unos minutos, ya que el pollo ya estará cocido.