El running es una de las actividades más practicadas, pero muchos corredores descuidan un aspecto fundamental: el entrenamiento de fuerza. Aunque parezca que solo se necesita resistencia para mejorar el rendimiento, la realidad es que fortalecer los músculos adecuados puede marcar la diferencia entre una carrera eficiente y una llena de molestias o lesiones.
Al incluir ejercicios de fuerza en la rutina, se refuerzan los músculos clave que soportan el impacto de la carrera, se mejora la técnica y se reduce la fatiga. Esto permite no solo correr más rápido y con mejor postura, sino también minimizar el riesgo de lesiones a largo plazo.
9Ventajas de combinar fuerza y running
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Un corredor que trabaja la fuerza regularmente tiene menos probabilidades de lesionarse, mejora su economía de carrera y optimiza su rendimiento. Fortalecer los músculos clave permite una mejor absorción del impacto, evitando sobrecargas en las articulaciones y mejorando la postura durante el esfuerzo.
Además, el fortalecimiento del core y de la musculatura estabilizadora reduce la fatiga y mejora la capacidad de mantener un ritmo constante durante toda la carrera.