Los champús son un producto de uso diario en la mayoría de los hogares. No solo cumplen con la función de limpiar el cabello, sino que muchos prometen restaurarlo, fortalecerlo y devolverle su vitalidad. Con tantas opciones en el mercado, elegir el adecuado puede ser una tarea complicada, especialmente cuando las marcas lanzan productos con promesas que parecen casi milagrosas.
En los últimos años, los champús reparadores se han convertido en los favoritos de los consumidores, ya que aseguran poder recuperar la salud capilar, sellar las puntas abiertas y fortalecer el cabello desde la raíz. Sin embargo, ¿realmente estos productos cumplen con lo que prometen? ¿O estamos cayendo en una estrategia de marketing bien elaborada?
10No te dejes engañar por la publicidad
Las estrategias de marketing pueden hacer que cualquier producto parezca imprescindible, pero la clave está en saber elegir con criterio y no dejarse llevar por promesas irreales.
Antes de comprar un champú, lee las etiquetas, revisa los ingredientes y elige siempre productos que realmente beneficien tu tipo de cabello. No todo lo que se vende como «reparador» es realmente efectivo, y la OCU lo ha dejado más que claro con su último análisis.