O Cebreiro físicamente es una pequeña población de montaña situada en Lugo, pero en realidad resulta ser mucho más que eso. Ubicado a unos 1.330 metros de altitud, se trata de una de las puertas por las que se entra a Galicia por los peregrinos que hacen el recorrido del Camino de Santiago. Es bello, posee mucha historia y un misticismo que te conquistará, por su tranquilidad y su espiritualidad, ofreciéndote una experiencia única.
En el término municipal de Pedrafita dO Cebreiro, O Cebreiro siempre ha sido el punto estratégico del paso desde los tiempos más remotos. Ya desde las épocas romana y medieval, este paso servía como la vía que comunicaba las diferentes regiones, lo que hacía que todo el comercio y el tránsito de personas tuviera que pasar por allí.
8La cocina en O Cebreiro es otro imperdible
Visitar O Cebreiro y no probar su cocina debería ser considerado un gran pecado. Su deliciosa gastronomía es el reflejo de las tradiciones y de los sabores de esa región, que son auténticos de Galicia. Entre los platos que debes probar sí o sí, porque son típicos de la provincia y la representan muy bien, se encuentran:
- Queso de O Cebreiro: no sólo porque es uno de los dos quesos más famosos que tiene Galicia, sino porque el queso de O Cebreiro ya tiene Denominación de Origen Protegida (DOP), de modo que es un manjar que se traduce en una pasta blanda de sabor suave elaborado a base de leche de vaca, perfecto para añadirlo al pan junto con mermelada o miel.
- Caldo gallego: cuando vayas a O Cebreiro en época de invierno, un imperdible es tratar de ganar un poco de calor con un delicioso caldo gallego, que es una sopa que se hace con lacón, chorizo, patatas y grelos. Sin duda, una receta que reconforta y es una muestra de lo mejor de la cocina de tradición de Galicia.
- Pulpo a la gallega: ninguna visita a una población de Galicia está completa sin probar el pulpo a la gallega. Es cierto que se trata de un plato que es bastante común en las áreas costeras, pero, igualmente se puede pedir en O Cebreiro. Preparado con aceite de oliva, sal gorda y pimentón, se trata de un verdadero manjar que jamás decepciona.