La miel ha sido considerada durante siglos como uno de los alimentos más naturales y beneficiosos para la salud. Utilizada como edulcorante natural, fuente de energía e incluso remedio casero, siempre ha gozado de una excelente reputación entre los consumidores. Sin embargo, un reciente estudio de la OCU ha sacudido la confianza en este producto al revelar que algunas marcas de miel vendidas en supermercados no cumplen con los estándares de calidad esperados. A pesar de su apariencia dorada y su etiquetado atractivo, muchas mieles comerciales presentan deficiencias en frescura, pureza y calidad nutricional. Lo más preocupante es que algunas de ellas contienen azúcares añadidos y han perdido sus propiedades beneficiosas. Si eres de los que pensaban que todas las mieles eran iguales, este informe de la OCU te hará replantearte tu próxima compra.
9¿Deberíamos dejar de comprar miel en supermercados?
El estudio de la OCU ha demostrado que no todas las mieles de supermercado son recomendables. Aunque existen opciones de alta calidad, también hay productos que han sido adulterados, procesados en exceso o que carecen de frescura. Para los consumidores que buscan una miel verdaderamente pura, la mejor opción es investigar bien antes de comprar y optar por productos certificados.
Este informe deja claro que, aunque la miel sigue siendo un producto natural con múltiples beneficios, no todas las marcas ofrecen la misma calidad. Elegir con cuidado y leer las etiquetas es fundamental para evitar sorpresas desagradables.