La princesa Leonor afronta en estos momentos un desafío poco usual, pero que resulta totalmente normal en la tradición naval. Cuando se unió al Juan Sebastián Elcano, el famoso velero de la Armada Española, los entendidos sabían que le esperaba una experiencia que muchos marineros han tenido que vivir, pero que en el caso de Leonor posee una naturaleza especial por causa de su condición real.
Es cierto que, para muchos integrantes de la marina española, esto no es otra cosa que una prueba más de lo que significa la vida al servicio de Elcano, aunque para Leonor, la princesa que se convertirá en la reina de España algún día, podría tener un significado que es particularmente diferente y así lo cuenta el portal de elnacional.cat/enblau.
7Enseñanzas necesarias para crecer
A pesar de las críticas y las opiniones encontradas sobre las tradiciones, parece que estas pruebas en el Elcano son necesarias para que la princesa se sienta parte de una comunidad y no solo de un linaje real. La participación en estas novatadas castrenses le enseñará importantes lecciones de vida y la ayudará a integrarse mejor en su futuro rol como heredera al trono.
En resumen, lo que le espera a Leonor en su travesía es mucho más que un simple viaje. Es una prueba de fuego para la futura reina, y aunque pueda ser vista como una serie de humillaciones simbólicas, son parte del proceso de crecimiento personal y de la formación que recibirá a bordo del Elcano.