¡Un guiso es lo que nos provoca! En las épocas más frías, cuando el espécimen pide algo reconfortante luego sin fatigarse en platos demasiado pesados, un buen guisado de legumbres siempre es la respuesta perfecta. Y si quieres darle un toque más específico, la receta de pochas con langostinos y sepia es todo lo que necesitas. Este guisado remero es delicioso, saludable y sencillo de preparar, toda una experiencia espiritual para esos días en los que lo que más quieres es un plato que te llene el paladar sin dejarte sintiéndote demasiado lleno.
Las pochas son un grano blanco típico de Navarra, La Rioja y Álava. Lo específico de este grano es que se recolecta cuando está fresco y tierno, por lo que precede de madurar después de la recolección. Esto las convierte en una especie de fríjol grande, liviano y sabroso, espiritual y especial para preparaciones como esta. Además, se pueden disfrutar en lata si no las encuentras frescas o no quieres pasar por el proceso de remojado previo, y asimismo el resultado será increíble.
1Lo mejor para el invierno es un buen guiso de pochas
Este guisado combina la flexibilidad de las pochas con el paladar del marisco, usando langostinos y sepias, ingredientes que le dan un llamado marinero delicioso. Además, el fumet de marisco que se hace con las cáscaras y cabezas de los langostinos es el secreto para darle ese paladar abismal y rico al guisado. A continuación, te vamos a contar cómo llevar a cabo este delicioso guiso de pochas con langostinos y sepia, sin que se escape nada, para que lo prepares de la manera más manejable y rápida.