En medio de tanto caos y el estrés que genera vivir en ciudades grandes, escapar de la rutina es necesario para gozar de una buena salud mental. En este contexto, existe un encantador pueblo medieval a menos de dos horas de Valencia, donde podrás disfrutar experiencias memorables, que te harán olvidar por un momento de la agitada realidad.
Disfrutar de un fin de semana diferente, dedicado a conocer sobre los lugares míticos del país, se convierte en el momento ideal para llegar a la provincia de Albacete, donde se encuentra uno de los pueblos más visitados de toda España. Ubicado sobre el meandro del río Júcar, se encuentra Alcalá del Júcar, un lugar que ofrece la posibilidad de disfrutar de sus imponentes paisajes, gastronomía y conocer más sobre su papel en la historia de Europa.
5UN PUEBLO CON UNA EXTENSA HISTORIA
Este pueblo medieval cuenta con una extensa historia, y es que podrás visitar el castillo de Alcalá del Júcar sobre una colina, que brinda vistas panorámicas del pueblo y del río Júcar. A pesar de que su construcción es de origen musulmán, lo han renovado a través del tiempo, para conservar su rica presencia en Albacete. La subida al castillo presenta un terreno empinado, sus fortalezas incluyen torres y murallas defensivas. Desde la terraza de esta imponente infraestructura, es posible capturar al todo el pueblo medieval. Mientras transcurre el recorrido podrás explorar el interior del castillo, donde se encuentra en exhibición, restos arqueológicos y zonas con información relevante sobre este histórico lugar.
Sobre este castillo del pueblo medieval se cuenta una trágica leyenda de amor, que tiene dos versiones, y que han perdurado por siglos. En ambas historias, existe una protagonista en común, la princesa árabe Zulema. En la primera, esta princesa es raptada por el rey moro Garadén para convertirla al islam y obligarla a multiplicar su descendencia. Pero, Zulema decide escapar de la pesadilla que le esperaba, lazándose desde la torre. En la segunda versión, la propia Zulema es mora, y huye del castillo de su padre, el moro Garadén, para establecerse en una aldea aledaña con un caballero cristiano.
A pesar de ser una historia con diferentes vertientes, aún no se ha logrado comprobar mediante textos documentados, que esta leyenda sea real. Por eso, ambas han perdurado en la cultura popular. Disfrutar de un fin de semana diferente, es posible si se toma la iniciativa por querer salir de la zona de confort para conectar con la naturaleza y salir de la rutina. Si deseas conocer y conectar con nuevas experiencia, te invito a visitar este mágico lugar cargado de historias maravillosas, comida increíble, y un fabuloso paisaje, perfectos para liberarte del estrés.