La DGT sigue reforzando su estrategia de control de velocidad en las carreteras españolas con la instalación de 24 nuevos radares en distintas provincias del país. Aunque esta información ha sido publicada de manera oficial, muchos conductores desconocen la ubicación exacta de estos dispositivos, lo que puede derivar en sanciones inesperadas. Estos radares, que incluyen 17 fijos y 7 de tramo, están diseñados para reforzar la vigilancia y reducir los accidentes de tráfico, una de las prioridades en la agenda de la Dirección General de Tráfico.
2Un mes de margen antes de sancionar
Como en anteriores ocasiones, la Dirección ha establecido un período de adaptación para que los conductores tomen conciencia de la presencia de estos nuevos radares. Durante el primer mes de funcionamiento, los infractores recibirán una notificación de advertencia en caso de superar los límites de velocidad permitidos. Una vez pasado ese periodo de prueba, los radares comenzarán a emitir sanciones, lo que significa que cualquier despiste podría salir caro para los conductores que no respeten los límites establecidos.