Las brújulas ha sido desde tiempos antiguos un instrumento vital para cualquier persona que se embarque en una aventura. Durante siglos, este pequeño artilugio ha servido como faro para viajeros, descubridores y navegantes, orientándolos en sus travesías, sin importar cuán lejanos sean los lugares a los que se dirijan.
Sin embargo, ¿te has detenido a pensar por qué las brújulas siempre señalan hacia el norte? Aquí, te revelamos de forma simple y comprensible el asombroso misterio que hay detrás de este artefacto.
2Aquí tienes un manual sencillo:
- Pon la brújula en un suelo plano: asegúrate de que la aguja pueda desplazarse sin problemas.
- Evita elementos magnéticos: al utilizar tu brújula cerca de imanes, materiales ferrosos o dispositivos electromagnéticos, es probable que la lectura no sea precisa.
- El aro móvil: esta rueda giratoria señala las direcciones principales (norte, sur, este y oeste) y se encuentra separada en 360 grados.
- Coloca la aguja en línea con la flecha que indica la dirección: por lo general, la punta roja de la aguja apunta hacia el norte.
- Almacena en tu memoria la dirección exacta. cuando sepas hacia dónde ir, asegúrate de ajustar la brújula cada vez que te pierdas y necesites encontrar tu camino de nuevo.
Sugerencia extra: al fusionar la brújula con un mapa, verifica y ajusta la discrepancia entre el norte magnético (apuntado por la brújula) y el norte geográfico (mostrado en los mapas). De esta manera, lograrás una orientación más certera.