Las placas de cocción vitrocerámica o de inducción son una alternativa fabulosa a los convencionales quemadores a gas. No solo lucen más contemporáneas y elegantes en la cocina, sino que también destacan por su practicidad y facilidad de manejo. No obstante, al igual que cualquier máquina eléctrica, necesitan ser atendidos adecuadamente para conservar su apariencia impecable.
La aparición de rasguños en la capa exterior de la vitrocerámica es una inquietud usual, aunque suele ocurrir con el paso del tiempo por el uso constante, no hay razón para alarmarse. Con este sencillo truco, lograrás restaurar la apariencia inicial de tu placa vitrocerámica sin necesidad de comprar artículos caros o salir de casa.
2El tema de los arañazos de la vitrocerámica
Si los arañazos son notorios en la placa, no solo estropean su aspecto visual, sino que también pueden impactar su desempeño. Rayas profundas podrían entorpecer la dispersión de calor, lo cual podría influir en la cocción de los alimentos. Adicionalmente, los rasguños podrían favorecer la acumulación de suciedad y ocasionar complicaciones de humedad, lo cual eventualmente podría disminuir la resistencia del artefacto.
Una sugerencia infalible para revitalizar tu superficie vitrocerámica por completo. En caso de contar con marcas en tu vitrocerámica, no tienes de qué preocuparte. Hay técnicas fáciles y baratas que puedes probar en tu hogar para restaurar su luminosidad. A continuación, te revelamos el secreto que puedes probar con productos habituales que seguramente encuentras en tu hogar: