¿Hacer una sopa de cebolla en casa? Hoy venimos con una receta que combina la simplicidad, el sabor y la tradición. Se trata de una sopa de cebolla con huevo y jamón, una receta que debería estar en todos los recetarios de los hogares de España. Con la inspiración de la archiconocida sopa de cebolla a la francesa, te traemos una versión en la que incorporamos el alma que tiene la cocina española, con ingredientes tan nuestros como el jamón ibérico o el pan rústico. Lo que resulta de ello es una preparación que reconforta, llena de matices, perfecta para cualquier momento.
No solo es riquísima, sino que se trata de una sopa que constituye el ejemplo práctico de como unos ingredientes simples pueden ser transformados en un platillo que es digno de cualquier restaurante, ideal para compartir con familia o amigos. Acompáñanos a averiguar cómo podemos hacer esta sopa, los secretos que debes dominar, así como una información interesante que probablemente no conozcas de este platillo.
52. Hay que tostar el pan que es lo que le da el toque crujiente a la sopa de cebolla con huevo y jamón
Para ello, debes cortar el rústico en rebanadas que tengan alrededor de un centímetro de gruesas y procede a tostarlo hasta que se dore. Una forma sencilla de hacerlo es ponerlo en el horno precalentado a 180 °C o en un tostador. Lo importante es que el pan quede crujiente, porque va a tener un papel fundamental en el resultado, ya que será el gran soporte de esta sopa de cebolla con huevo y jamón y va a absorber el caldo sin que se deshaga.