Berenberg considera que los objetivos del plan estratégico 2025-2027 de Endesa «parecen creíbles y alcanzables». Sin embargo, y dado que las acciones de la eléctrica se negocian cerca del precio objetivo que le concede la entidad alemana (20 euros), ésta prefiere optar por un enfoque conservador y estampa a los títulos bursátiles de la energética un tibio ‘mantener’.
La ‘hoja de ruta’ de Endesa para el próximo trienio prevé un crecimiento anual compuesto de hasta el 8% en el dividendo del grupo durante este período, siempre y cuando la filial de Enel alcance el extremo superior de su rango de previsión de beneficio neto ordinario para 2027.
En este caso, Berenberg también opta por no pillarse los dedos, pronosticando un beneficio neto en la mitad inferior del rango, lo que aún genera un «respetable» 4% de crecimiento en el dividendo por acción, frente al 5,7% de rendimiento estimado para el conjunto de 2024.
ENDESA GENERA UN MODERADO OPTIMISMO
No obstante, la trayectoria de Endesa durante dicho período encierra una notable posibilidad de «riesgo al alza» (sic) si la creciente demanda energética de los centros de datos impulsa una mayor producción de energía renovable por parte de la compañía.
«Nuestras estimaciones de beneficio por acción para 2024, 2025 y 2026 cambian en +6%, -3% y -6%, respectivamente» -continúa el análisis- «La revisión al alza de nuestras cifras para 2024 refleja un mejor desempeño esperado en distribución y menores costos centrales, parcialmente compensados por un desempeño más débil en sus negocios de generación y renovables».
Respecto al resultado bruto de explotación (Ebitda), las revisiones de Berenberg para 2025 y 2026 reflejan una subida en generación, suministro y redes, compensado por estimaciones más bajas para renovables y mayores gastos financieros.
BERENBERG ESPERA QUE LOS APARTADOS DE RENOVABLES, GENERACIÓN Y SUMINISTRO A CLIENTES APORTEN 100 ‘KILOS’ CADA UNO AL EBITDA DE ENDESA
El análisis profundiza en este aspecto, profetizando que las redes serán el principal motor de crecimiento del Ebitda del grupo, concediéndolas el potencial de elevar en 300 millones de euros los balances de la filial española de Enel. En concreto, espera contribuciones adicionales de aproximadamente 100 millones de euros en cada uno de los mencionados apartados de renovables, generación y suministro a clientes.
Endesa se comprometió además a un suelo de un euro por acción en su plan 2024-2027, con un potencial de hasta un 70% de ratio de distribución. En 2024, el grupo espera pagar 1,2 euros por acción y ve potencial para pagar 1,5 euros por título en 2027. La previsión de Berenberg para 2027 se encuentra en la mitad inferior del rango, lo que, con un ratio de distribución del 70%, genera un dividendo proyectado de 1,36 euros por acción.
«Nuestras previsiones se sitúan en la mitad inferior del rango objetivo de beneficio neto ordinario de Endesa para 2027, aunque ligeramente por encima (+3%) del consenso de Bloomberg» -explica el informe- «Pronosticamos inversiones por 9.600 millones de euros para [el período] 2025-2027, que incluyen la adquisición de 0,6 gigavatios (GW) de activos hidroeléctricos, en línea con el plan estratégico del grupo. La mayor parte de esta inversión se destinará a redes (42%) y renovables (39%).
HITO EN RENOVABLES
El pasado 4 de enero, Endesa, a través de un comunicado, informó que su filial de redes, e-distribución, ha superado la cifra de 30 GW de capacidad renovable distribuida conectada a través de su infraestructura, aprovechando para recordar, por enésima vez, que invertir en el entramado de transporte eléctrico es crucial para la transición energética.
Los 30 GW de potencia limpia a los que ha llegado la red de Endesa permiten, afirma la eléctrica, alimentar el consumo de casi 20 millones de hogares y evitar la emisión de cerca de 30 millones de toneladas de CO2.