Seguro que alguna vez te has frustrado porque has visto demasiado rápido una fotografía de una única visualización en WhatsApp. Este tipo de fotos fue una novedad de la aplicación de Meta para garantizar una mayor privacidad, de manera que el contenido fuera efímero y se eliminase después de verlo. Pero parece que el sistema creado por WhatsApp no ha funcionado correctamente y ha salido a la luz un pequeño truco que puede ayudarte a volver a ver estas imágenes. Y si bien es cierto que para los usuarios puede ser una buena medida, también ha creado cierto debate sobre la ética de la privacidad en el mundo digital.
3¿VIOLACIÓN DE LA PRIVACIDAD?
El truco para recuperar imágenes de visualización única en WhatsApp plantea un dilema ético puesto que se trata de una función creada como garantía de seguridad. Y aunque puede entenderse como una herramienta práctica para situaciones donde el contenido tiene un propósito útil y legítimo, puede también verse como una transgresión y ataque a la privacidad de quien la envía, rompiendo el propósito para el que fue diseñada.
La opción de visualización de imágenes única en WhatsApp fue implementada como una medida para reforzar la privacidad en la comunicación. Está pensada para aquellos casos en los que alguien quiere compartir contenido efímero que no sea almacenado ni accesible después de ser visualizado. Así se protege información sensible, se garantiza la confidencialidad y se respeta la intención del remitente de que ese contenido desaparezca.
No obstante, hay contextos en los que el uso de este truco puede considerarse legítimo y hasta necesario. Esto solo sucede en casos en los que la imagen que se envía contiene datos importantes como una dirección, un documento o una información que debe ser consultada varias veces. Pero en este contexto el fallo se encuentra en que este tipo de imágenes no deberían enviarse en forma de visualización única, sino todo lo contrario. Si realmente existen detalles que deban consultarse nuevamente, la solución lógica sería pedirle a la otra persona que forma parte de la conversación que realice el envío de nuevo.
Sí es cierto que si en ese momento la persona no se encuentra disponible, se puede entender el truco tecnológico como una excepción que no busca vulnerar la privacidad del remitente, sino cubrir una necesidad únicamente puntual. Pero en estas situaciones también es necesario hacer una reflexión interna y a nivel colectivo sobre el consentimiento y -a ser posible- lo ideal sería comunicar a la otra persona la necesidad de acceder de nuevo a la información con la que se envió el archivo.
¿El fin justifica los medios? Es un planteamiento al que hay que darle ciertas vueltas. Pero lo que está claro que este truco de WhatsApp que te puede venir muy bien debe ser usado en todo momento como un caso concreto y excepcional, tras una recapacitación sobre si tiene sentido o no su utilización. ¿Realmente necesitas utilizar esa imagen? ¿Estás respetando la intención de quien te envió la imagen? Una vez obtenidas las respuestas, ya podrás valorar si usas o no este truco.