¡Calamares fritos! Casi todos estaremos de acuerdo en que son deliciosos, y además es uno de los platos más icónicos de la cocina española. Poseen una textura tan crujiente y un sabor tan inconfundible, que son una receta básica en todas las cocinas de nuestro país.
No obstante, freír los calamares perfectos es una tarea que no todos llegan a dominar, porque no es tan simple como puede parecernos. Lograr que nos queden extra crujientes, pero al mismo tiempo ligeros, sin tener que agregar calorías adicionales es una tarea que nos parece titánica y que hay que ser un experto para dominar ese arte, sin embargo, Karlos Arguiñano, súper reconocido chef español no ha echado un cable y nos ha contado su truco para no fallar nunca.
8Recomendaciones finales para que tengas el resultado perfecto
- Emplea calamares frescos: normalmente, los congelados van a liberar agua en el proceso de fritura, lo que afectará significativamente la textura que va a tener el rebozado.
- Escurre siempre el exceso de aceite: se recomienda poner los calamares encima de un papel de cocina absorbente cuando los saques de la sartén.
- Sirve de inmediato inmediatamente: Si quieres disfrutar la textura crujiente del rebozado, te los debes comer de una vez, no esperes a que se enfríen porque pierden su encanto.