La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha nuevas medidas para 2025, dirigidas a reforzar la seguridad vial y reducir el número de accidentes en las carreteras españolas. Entre las novedades más destacadas se encuentra la actualización del listado de enfermedades y condiciones de salud que pueden limitar o impedir la renovación del carnet de conducir. Esta iniciativa, que ha causado revuelo entre los conductores, busca garantizar que todas las personas al volante cumplan con las condiciones óptimas de salud para evitar riesgos innecesarios.
La seguridad vial es una prioridad constante para la Dirección, y estos cambios pretenden adaptarse a las necesidades actuales, teniendo en cuenta el envejecimiento de la población y el incremento de enfermedades crónicas. A continuación, analizamos en detalle las principales afecciones contempladas en este listado actualizado y los procedimientos que se deben seguir para garantizar la renovación del carnet.
3Problemas neurológicos y su impacto en la seguridad vial
En el ámbito neurológico, enfermedades como la epilepsia representan una preocupación importante. Las crisis epilépticas pueden ocurrir sin previo aviso, lo que pone en peligro no solo al conductor, sino también a otros usuarios de la carretera. La normativa exige que las personas con epilepsia demuestren un control efectivo de su condición durante un periodo de tiempo prolongado antes de considerar la renovación de su carnet.
Asimismo, los antecedentes de accidentes cerebrovasculares requieren un análisis detallado. Estos eventos pueden dejar secuelas como problemas de movilidad, visión o memoria, que afectan la capacidad de conducir. En estos casos, la evaluación médica es crucial para determinar si el conductor puede retomar sus actividades habituales al volante.