Cuando vamos al supermercado, elegir entre la amplia variedad de productos que llenan las estanterías puede convertirse en un verdadero desafío. Esto es especialmente cierto cuando se trata de productos de uso diario, como el tomate frito. Cada marca promete ser la mejor, pero ¿cómo saber cuál es realmente la opción más saludable y equilibrada? Ahí es donde entra en juego la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), una entidad que frecuentemente analiza productos de consumo masivo para facilitar nuestras decisiones de compra.
En su último análisis, la OCU puso su atención en el tomate frito, evaluando las diferentes opciones disponibles en supermercados como Mercadona, Carrefour y otros grandes distribuidores. Su objetivo era claro: identificar cuál es el mejor tomate frito en términos de perfil nutricional, calidad y precio.
1La importancia de revisar el etiquetado
La OCU insiste en la importancia de revisar siempre el etiquetado de productos como el tomate frito antes de comprarlos. Aunque el sabor puede ser un factor determinante para muchos consumidores, otros aspectos, como el contenido de grasas, azúcares y sodio, son igual o más importantes.
El nivel de sodio, en particular, es un aspecto clave que no debemos pasar por alto. Según la organización, un consumo excesivo de sodio puede ser perjudicial, especialmente para personas con hipertensión. Por ello, aconsejan optar por productos que mantengan este componente en niveles bajos.
