En el mundo actual, donde las reuniones de trabajo y los eventos corporativos son cada vez más frecuentes, tener una oferta gastronómica que sorprenda y satisfaga a todos los asistentes es fundamental. Balbisiana ha lanzado su innovadora pirámide dulce-salado, un snack que ha comenzado a captar la atención de muchas oficinas y espacios de trabajo. Este exquisito producto, diseñado para un total de 15 personas, combina la versatilidad de alimentos salados y dulces, proporcionando una experiencia culinaria que va más allá de lo convencional.
La pirámide de Balbisiana no solo es visualmente atractiva, sino que también cuenta con una deliciosa variedad de opciones, desde mini sándwiches hasta cookies, todo dispuesto para hacer de cualquier reunión un evento memorable. Con un costo de 75 euros, esta propuesta ha sido meticulosamente pensada para adaptarse a los formalismos de eventos de empresa, celebraciones privadas, y hasta cumpleaños, haciendo que el arte de picar se convierta en un placer gourmet que todos pueden disfrutar.
1UNA PIRÁMIDE CON SABORES INSUPERABLES
La calidad de la pirámide de Balbisiana radica en su impresionante variedad de sabores, cuidadosamente seleccionados para ofrecer una experiencia gastronómica completa. En la parte salada, los mini sándwiches destacan, incluyendo opciones como el delicioso pollo al curry, que aporta un toque exótico; el clásico jamón y queso, siempre bien recibido; el innovador huevo y bacon con cebollino, que combina lo mejor del desayuno; y el elegante salmón con eneldo y queso crema, ideal para quienes prefieren sabores más refinados. Cada uno de estos sándwiches es una pequeña obra de arte, presentada de tal manera que invitan a ser degustados.
Por otro lado, los mini wraps amplían aún más la oferta de sabores. Platos como salmón y queso crema, pimiento rojo y hummus, bacon y huevo, y pollo aseguran que todos los gustos estén cubiertos. Estos wraps no solo son prácticos para consumir, sino que también son nutritivos y coloridos, haciendo de cada bocado una fiesta para los sentidos. Esta diversidad no solo nutre, sino que también invita a la conversación y la celebración, características esenciales en cualquier tipo de encuentro.