El Banco Santander ha dado un paso estratégico importante al anunciar el lanzamiento de cuatro ofertas simultáneas de recompra de obligaciones que comenzarán este 7 de enero. Esta operación, que forma parte de su estrategia de gestión activa de pasivos y capital, representa una inversión potencial de hasta 2.000 millones de dólares (equivalentes a 1.920,9 millones de euros).
Las operaciones de recompra se centran en cuatro emisiones de obligaciones diferentes, cada una con sus propias características y vencimientos. La entidad financiera ha establecido que las ofertas de venta solo serán aceptadas en importes de principal mínimos de 200.000 dólares, coincidiendo con el valor nominal de cada obligación, y en múltiplos enteros de la misma cantidad para importes superiores.
Detalles de las emisiones objetivo de Santander
Las cuatro emisiones objeto de recompra presentan el siguiente perfil:
- Una primera emisión con vencimiento el 24 de marzo de 2023, con un importe nominal pendiente de 1.250 millones de dólares
- Una segunda emisión que vence el 28 de mayo de 2023, con 1.500 millones de dólares pendientes
- La tercera emisión, con fecha de vencimiento el 18 de agosto de 2023, presenta un nominal pendiente de 1.750 millones de dólares
- La última emisión, con vencimiento más largo hasta el 25 de marzo de 2026, tiene un nominal pendiente de 1.500 millones de dólares
Condiciones y proceso de la operación
El banco ha establecido un marco temporal definido para estas operaciones, que finalizarán el 14 de enero a las 17:00 horas (hora de Nueva York), salvo prórroga o terminación anticipada. Es importante destacar que las obligaciones adquiridas serán canceladas y no continuarán en circulación.
La entidad ha implementado un sistema de priorización para la aceptación de las ofertas en caso de que la contraprestación máxima de 2.000 millones de dólares no sea suficiente para cubrir todas las obligaciones ofertadas. En este escenario, Santander aceptará las obligaciones según su nivel de prioridad establecido.
Como parte de su flexibilidad operativa, el banco se reserva el derecho a renunciar a la condición de contraprestación máxima para una o más ofertas, pudiendo aceptar todas las obligaciones de la serie objeto de la oferta si lo considera oportuno.
