Ahora que casi es invierno y hace mucho frío, la tentación de conducir con un abrigo grueso para protegerse del frío es grande. Sin embargo, ¿sabías que esta práctica podría ponerte en problemas con la DGT? Aunque no hay una regla que prohíba específicamente el uso de abrigos al volante, hay varios aspectos que la Dirección General de Tráfico considera cruciales para tu seguridad. Hay varias cosas que es mejor que sepas y que la Dirección justo acaba de recordar a todos los conductores que estos días circulen por las carreteras de nuestro país. Por eso, a lo largo de este artículo, descubrirás todo lo que necesitas saber para evitar sorpresas en tu próxima salida.
8La DGT no quiere que el frío te cueste caro
Aunque conducir con abrigo no está explícitamente prohibido, la DGT subraya que las consecuencias de no garantizar la seguridad pueden ser graves. Un abrigo que limite tus movimientos no solo te expone a sanciones, sino que también incrementa el riesgo de accidentes. La Dirección General de Tráfico recomienda una conducción consciente, donde la seguridad siempre esté por encima de la comodidad. Recuerda, un pequeño error puede ser muy costoso.