Mantener los neumáticos del coche en buen estado es fundamental para garantizar la seguridad en la carretera. Y eso para porque los neumáticos del coche estén bien. Unos neumáticos en óptimas condiciones mejoran el agarre, reducen la distancia de frenado y evitan accidentes, especialmente en condiciones climáticas adversas. Además, revisar regularmente la presión y el desgaste de la banda de rodadura contribuye a optimizar el consumo de combustible y prolongar su vida útil, ahorrando dinero y recursos. Circular con neumáticos deteriorados aumenta el riesgo de pinchazos y aquaplaning, comprometiendo tanto al conductor como a otros usuarios de la vía. La prevención es clave para viajar seguro y sin contratiempos. Te contamos para qué sirven los pelos de los neumáticos y si hay que quitarlos de las ruedas del coche.
1Lo que puede pasar si tus neumáticos no están en condiciones
Circular con neumáticos en mal estado puede tener graves consecuencias. Un desgaste excesivo reduce el agarre, aumentando el riesgo de deslizamientos y accidentes, especialmente en curvas o pavimento mojado. La presión incorrecta afecta la estabilidad del vehículo y dificulta el frenado, incrementando las posibilidades de colisiones. Los neumáticos dañados también son propensos a pinchazos o reventones, que pueden provocar la pérdida de control del coche a altas velocidades. Además, un mantenimiento deficiente incrementa el consumo de combustible y las emisiones contaminantes. Ignorar estas señales pone en peligro no solo a los ocupantes del vehículo, sino también a otros en la carretera.