La Dirección General de Tráfico (DGT) utiliza habitualmente las cartas como medio oficial para comunicarse con los conductores. A través de estas, informa sobre renovaciones de permisos, sanciones, avisos relacionados con la seguridad vial o puntos acumulados en el carnet de conducir. Este método asegura que los mensajes lleguen de forma personalizada y oficial, ofreciendo detalles claros y manteniendo un registro tangible de la correspondencia. Aunque en los últimos años se ha impulsado el uso de canales digitales, como el correo electrónico o la aplicación miDGT, el formato físico sigue siendo relevante, especialmente para conductores con menos acceso a tecnologías. Pero si te llega este SMS de la Dirección, es una estafa: mejor no lo abras.
2Es raro que alguien no haya sido víctima de un intento de estafa
Es cada vez más raro que alguien no haya sido víctima de un intento de estafa. Con la proliferación de fraudes online y en persona, todos estamos expuestos a ser engañados, ya sea a través de correos electrónicos, llamadas telefónicas o incluso redes sociales. Los estafadores emplean tácticas cada vez más convincentes, adaptándose a las circunstancias y a la tecnología disponible. La facilidad con la que pueden acceder a nuestros datos personales aumenta el riesgo, haciendo que la prevención y la información sean clave para evitar ser víctimas de estos delitos.