Actualmente las plataformas de streaming para ver series y películas (como Netflix, Disney+ y Max) se han convertido en un servicio indispensable en casi todos los hogares alrededor del mundo. Y es que las personas ahora prefieren escoger qué ver y en qué momento antes que conformarse con lo que la televisión tradicional muestra en su agenda diaria. Por esta razón, cualquier cambio que realizan este tipo de sitios afecta a una gran cantidad de usuarios y a su forma de afrontar cada día.
Entre todas estas plataformas, sin lugar a dudas la que más se destaca sigue siendo Netflix, pues estamos hablando del gran referente del sector, al cual todos los servicios similares le copian las medidas que implementa con éxito; un ejemplo de ello es la caza de las contraseñas compartidas o el arribo de planes más económicos con anuncios. Aunque de una u otra forma esta clase de novedades buscan beneficiar al usuario, de igual manera hay algunas que lo terminan perjudicando.
1Mejor rendimiento = Menos compatibilidad
Más específicamente, estamos haciendo referencia a aquellos cambios orientados a mejorar el rendimiento de su aplicación y la experiencia de la mayoría de usuarios, algo similar a lo que suele hacer Netflix cada tanto tiempo. No obstante, el problema en estos casos es que esta clase de mejoras acaban afectando negativamente a algunas personas, particularmente a las que cuentan con dispositivos bastante antiguos.
Bajo esta lógica, Netflix ha anunciado que el próximo 1 de diciembre llevará a cabo la implementación de una serie de cambios que tienen como objetivos optimizar los recursos y mejorar el rendimiento en dispositivos modernos, lo cual traerá consigo que esta plataforma deje de estar disponible en todos los televisores fabricados antes del 2014.