La salud bucal es un pilar fundamental en el bienestar general de las personas. Sin embargo, muchas veces se pasa por alto que el cuidado de la boca comienza mucho antes de que los dientes sean visibles. Este proceso inicia en un período crucial conocido como los 1.000 días de oro, que abarca desde la concepción hasta el segundo año de vida. Este lapso incluye los 270 días de gestación y los primeros 730 días postnatales, durante los cuales se establecen las bases para una salud bucal óptima a lo largo de la vida.
10La lactancia materna: clave para la salud dental
Una vez que el bebé nace, la leche materna se convierte en su fuente principal de nutrición. Este fluido biológico dinámico no solo proporciona los nutrientes necesarios para el crecimiento y desarrollo, sino que también juega un papel crucial en la salud bucal. La lactancia materna establece patrones de crecimiento dental adecuados y contribuye a la formación correcta de los maxilares y la estructura facial.
La leche materna es altamente especializada y varía en composición a lo largo del tiempo, adaptándose a las necesidades del bebé. Además de nutrir, contiene propiedades que protegen contra infecciones bucales y promueven un microbioma oral saludable, lo que reduce el riesgo de caries. Se recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, y después de este periodo, es importante combinarla con hábitos de limpieza bucal.